Pienso igual que el comentario de Anónimo.
Si te pones a esperar el momento, quizás nunca llegue.
Yo me casé con 30 años y no estaba dispuesta a esperar mucho para quedarme embarazada. Mi marido decía que era muy pronto, que nos tomasemos unos años para estar solos.
Pero yo pensaba que me pasaría como a una amiga, venga a esperar a esto o aquello y se plantó en los cuarenta y ya se acomodaron y no quisieron.
Yo me puse mano a la obra desde el primer día. Y seis meses despues hice carambola.
Nació mi hijo y despues de la baja maternal me despidieron. Por otro lado, yo estaba deseando irme pero preferí hacer el chanchullo del despido por faltas continuadas al trabajo. Ellos no querian que yo tuviera responsabilidades y yo no los quería a ellos.
Mi marido ha estado trabajando desde entonces,en el mismo empleo y no es funcionario ni empresario.
Y cuando llegó la hora de buscar empleo me dijo que hiciera lo que quisiera, que él podía mantenernos a los tres, pero que yo hiciera lo que quisiera.
Encontré un trabajo de media jornada de administrativo, que son mis estudios, y mi niño lo crié yo, sin pedir ayuda a abuelos ni llevarlo a guardería.
Yo no me arrepiento.