Yo conocía a mi suegra antes de serlo y eso hace que a veces se tome demasiadas confianzas.

Conocí a mi suegra al salir de la pandemia. Empezamos a trabajar juntos en un super y desde el minuto cero sentí una conexión muy grande.

Yo acababa de salir del armario y en casa no se lo habían tomado nada bien y decidí salir de allí. Ella me ha tratado siempre como a un hijo y una tarde, mientras merendábamos, me contó que su hijo también era gay y que lo supo desde siempre.

 

Como yo era nuevo por la zona, me lo presentó para que tuviera amigos, saliera un poco con gente de mi edad y no estuviera solo. No sé si fue una estrategia, pero llevo varios meses saliendo con él.

Ella y yo seguimos con la misma relación, la quiero muchísimo, pero lleva unas semanas algo pesada. Creo que se ha enterado de que tenemos relaciones sexuales y está muy pesada. Nos compra condones y lubricante sin pedirlo, pero ahí no queda la cosa.

Se ve que ha estado investigando y ahora nos etiqueta en todo lo que ve  que es gay, pero no utiliza ningún tipo de filtro.

Una cosa es que nos etiquete en libros sobre relaciones entre chicos, en fotos de parejas con hijos, series de moda o nos recomienda cuentas gayfriendly, pero hace unos días se salió.

‘Nenes, os he etiquetado en un una cosa de cruising, seguro que os gusta’

Imagínate la gracia, mi suegra etiquetándome en lugares donde tener sexo sin compromiso a lo ‘aquí te pillo, aquí te mato’. 

Me da un poco de vergüenza decírselo, pero necesita tomárselo con calma y normalizarlo. El que su hijo tiene novio, no significa solo piense en ello.

Yo entiendo que está de subidón porque nos ve muy felices, me adora tanto como yo a ella y es maravilloso que formemos una familia, pero igual que no me meto yo en sus momentos íntimos, ella debería hacer lo mismo.

Anónimo

 

Envía tus movidas a [email protected]