Lo mismo te parece un poco tonta está idea, pero… Y si no le mencionas en ningún momento el tema del peso? Y cuando le digas algo al respecto lo enfoques a ir comiendo mejor, y más sano. Podéis aprender a cocinar recetas sanotas que le sepan a él bien (y deje de tener la excusa para no comerlas), o ir proponiendo planes más activos, que impliquen moverse, pasear… La verdad es que la combinación de mala alimentación con tabaco y vida sedentaria (esto último lo presupongo por lo que dices de cómo respira) me parece un cóctel molotov (ya independientemente del peso, porque igual de peligroso sigue siendo para cualquiera, pese más o menos). Esperemos que te vaya haciendo caso. Si no, recuerda que es algo que depende en último término de él, aunque pueda resultar muy frustrante desde tu posición, si él no quiere empezar a hacer cambios… No se le puede obligar, por mucho que te afecte negativamente esa decisión. (Y mi super enhorabuena por haber empezado a cuidarte más por tu niño, que no siempre es fácil!)

Hola, guapa! Mira, te digo lo siguiente como médico, como persona que adora el movimiento body positive y como chica cuyo padre tuvo un ictus el año pasado y casi muere por seguir ese tipo de vida insana (sí, eso es lo que pasa cuando no le echas cuenta al colesterol): no lo dejes pasar. No es lo mismo que alguien en el autobús te diga «oye chica, haz la dieta de la papaya que te veo muy gordi, es por tu salud» a que tu pareja, que sabe que no haces deporte, que fumas, que te alimentas mal y que estás teniendo problemas por ello se preocupe por ti. Si hiciera todo eso y pesara 60 kilos seguiría siendo MALO; pero desgraciadamente, ser obeso es OTRO factor de riesgo independiente y tiene sus propios problemas asociados, así que esencialmente está jugándose a la lotería su calidad de vida. Claro que no puedes obligarlo, igual que no puedes obligar a un drogadicto a dejar de consumir si él no quiere; pero apoyarlo, sugerirle que vaya a su médico de familia o mostrarle lo divertido que puede ser hacer deporte juntos (que tampoco te lo tiene que llevar a hacer la maratón, sólo andar un poquito cada día o hacer rutas los fines de semana ya es ganar en salud) es un principio. Explícale lo que nos has dicho a nosotras, dile que tú lo quieres tal y como es y te gusta su cuerpo, pero que quieres lo mejor para vosotros y para vuestro futuro.

Por cierto, NUNCA podré recomendar lo suficiente que vayáis a un nutricionista o a un endocrino. Yo llevo toda mi vida en un peso normal pero comiendo mierda por un tubo, sentía que tenía una relación rara con la comida y no me sabía nutrir, y no me gustaban muchas de las verduras (sí, soy médico, los médicos también hacemos cosas estúpidas e insanas en nuestra vida). Cuando encontré a mi nutricionista fue todo un cambio y ahora me siento mejor, menos hinchada, con más energía, menos hambre… No hay por qué vivir a dieta ni que sea un suplicio! Sólo hay que encontrar a alguien que os apoye, tenga en cuenta vuestras necesidades y sobre todo no sea gordófobo. Mucha suerte y ánimo, y gracias por criar a tu hijo con una mentalidad sana.

En ningún momento creo que esta página haga apología de la obesidad y de los hábitos poco saludables. Todo lo contrario, trata sobre la aceptación, la estabilidad emocional, el sentirse bien con uno mismo… Cosas muy importantes y que son el punto de partida para todo lo que uno se proponga en la vida.
No creo que tu planteamiento sea una traición a la filosofía de esta página, pues tu te quieres y lo quieres a él tal cual, amas tu cuerpo y el suyo y eres feliz.
Creo que querer cuidarse por tu salud y por vuestro hijo es algo muy normal. Y esta claro, que si existen riesgos cardiovasculares dejar de fumar y comer sano (al margen del peso, porque parece que no se puede comer sano y estar gordo) es esencial.
Habla lo con él y exponle tus preocupaciones tal cual, sin medias tintas…
Creo que es perfectamente entendible tu preocupación.