Buenas!!

Hace unos meses mi pareja y yo tuvimos nuestra primera gran crisis, después de 10 años de relación. Derivó de varias circunstancias que, finalmente, nos llevaron a darnos un tiempo y a tomar distancia real, ya que él vive en Madrid (ciudad a la que nos mudamos juntos unos meses antes de la ruptura) y yo en Granada (de dónde soy natural).

Aunque tiempo antes de que se produjera la crisis yo creía o sentía que ya no lo quería Como pareja, cuando se produjo la semi-ruptura me quedé echa mierda y tenía el absoluto convencimiento de que era ÉL, el hombre de mi vida.

Finalmente, volvimos tras casi un mes sin ni si quiera hablar por teléfono ni WhatsApp. Pero cuando lo hicimos él estaba en una posición muy altanera y subida, y a mí me entró el pánico del siglo… de volver a cagarla, de hacer algo que le hiciera replantearse estar conmigo. Así que he estado varios meses sin sentirme en paz y sin la tranquilidad que produce estar bien con alguien.

La cuestión es que hace un par de semanas se me empezó a quitar ese miedo y comencé a darme el valor que realmente tengo. Soy una tía válida, con afán por progresar en la vida, buena persona y con un atractivo físico apto para mucha gente (curvy de toda la vida). En todo esto también me ha ayudado el hecho de tener a un amigo que me ha confesado que está enamorado de mí (yo no siento nada por él, lo conozco desde siempre y lo veo como un hermano) y el haberme reencontrado con un viejo amigo con el que nunca llegué a tener nada, pero que ahora parece que me ve como una tía atractiva e interesante (tampoco he hecho nada con él). Con esto me refiero a que siento que si con mi novio no va bien, hay más peces en el mar… Peces a los que le gustaría nadar conmigo.

Descubrir esto ha sido como quitarme un peso enorme de encima, me he sentido liberada y ahora actuo sin el miedo a que mi pareja me deje. Incluso he llegado a plantearme si yo quiero seguir con él, ya que en nuestro último encuentro he empezado a darme cuenta de que no disfruto del todo con él: me aburro un poco, no me excita mucho sexualmente, tenemos formas diferentes de ver la familia, diferente ideología política, etc.

Y ahora me siento pérdida…

Es importante decir también que actualmente su madre está sufriendo una enfermedad muy muy grave (de la cual yo estoy muy pendiente, ya que su familia también es de Granada) y no es un buen momento para tomar la decisión de dejarlo (en caso de que esa fuera la mejor opción).

Alguien podría orientarme un poco en este tema? Gracias de antemano.