Hace un par de meses que estamos conociéndonos y el sábado me quede a dormir en su casa.
Cuando me desperté, estaba muy contenta pues la noche había sido fantástica en todos los sentidos, de verdad hasta pensé que había encontrado a alguien con quien poder, al menos, empezar algo… todo se vino abajo en el desayuno.
A algunos os parecerá una tontería, pero os cuento: Llegué a la cocina y estaba recogiendo, me puso un café y mientras me lo tomaba y hablábamos él seguía con su tarea que no era otra que fregar la alfombrita y el comedero y bebedero de su perro, pues bueno cuando ve que acabo el café coge la taza y la friega con el mismo estropajo que estaba fregando las cosas del animal
No le dije nada pero me dio mucho asco, me entraron ganas hasta de vomitar. Sé que soy escrupulosa, lo admito, pero eso en concreto me parece una guarrería.
Yo tengo una gatita y tengo un estropajo y una bayeta especial para sus cacharros.
Estoy bastante afectada, aunque os parezca una estupidez, el chico me gusta y hace muuuuchooo que no encontraba a nadie así, pero esto me tira mucho para atrás no lo puedo evitar.
Yo aún vivo con mi madre así que a mi casa no podemos ir.
Además ahora me da por pensar si el perro se acuesta en las mismas sábanas donde dormí.