Hoolaa weloversizees!!
Vengo a contaros mi historia, o más bien la de mi madre un poco en respuesta a esa supermami (como lo sois todas) de casi 70 años que nos ha contado que ha sido madre y médico, y está bien.
Así que no he podido resistirme a contar La historia de mi madre desde el punto de vista de una hija.

Spoiler: Viene textaco

Como esa señora mi madre (que cada día tengo más claro que era una adelantada a su época) también tenía una profesión, una carrera y fue madre.
Como mujeres a día de hoy las cosas no las tenemos fáciles, en España hace 40 años ni nos contemos.
Os pongo en antecedentes:
Mi madre decidió estudiar una carrera a pesar de las miradas de desaprobación de todo el mundo, menos de mis abuelos que eran maravillosos y con una mente sorprendentemente abierta porque claro, en esa época una mujer tenía que casarse y tener hijos antes que cualquier cosa.

Ella fue la única mujer en su carrera y decidió no casarse ni tener hijos hasta acabarla. Todo el mundo la decía que se iba a quedar “para vestir santos”, que algo mal tenía que haber en ella, ¡hasta le decían a mi padre que la dejara que le iba a dar problemas! Una locura vamos.
Ya os adelanto que a ovarios a mi madre no la gana nadie, y eso solo le daba más ánimos para seguir con su sueño. Trbajaba de secretaria por el día y se sacaba la carrera por las noches, el último año se quedó embaraza, se graduó embaraza, se casó embarazada (catástrofe para todo el mundo claro, lo que la faltaba para que la hicieran la cruz por bruja), buscó trabajo embaraza (sí 9 meses la dieron para mucho) y lo encontró. Trabajó duro, muy duro y muchas horas. Ascendió, se convirtió en la primera mujer directiva de su compañía, con una hija en casa, y no pasó nada.
Sí, pasaba muchas horas fuera, no, no nos llevaba al colegio porque se iba a trabajar muy temprano, sí, venía muy cansada a casa, no, no fue peor madre por ello. Había días que venía tan cansada que cuando la pedíamos un puré de patata para cenar la faltaba un tris para mandarnos a la porra jaja, no, no nos desnutrimos.
Trabajaba muchas horas, era mujer, profesional y madre, no quiso elegir una, podía con todas juntas. Triunfó en su profesión y triunfó como madre, nos acostaba, nos cuidaba, nos bañaba, nos quería (nos= a mi hermana y a mi). La gente nos miraba con pena cuando mi madre se perdía alguna función del colegio o no podía ir a una reunión del AMPA, como si fuera peor madre por no pasarse la vida cotorreando y poniendo a parir a otras madres (a mi madre principalmente).
Me estoy enrollando mucho no?
Lo que quiero decir, que no sé si queda claro, es que mi madre, antes que madre fue mujer, antes que esposa, fue mujer, no vivió a través de nadie y no por eso fue peor madre, hubo momentos en los que no estuvo y un millón en los que sí, que no estuvo ausente en nuestras vidas por trabajar mucho, y que ahora con 35 y 26 años que tenemos, no nos podemos sentir más orgullosas de tener una madre luchadora y trabajadora, independiente y sobre todo que no fuera a las reuniones de AMPA y se perdiera algunas funciones del colegio (porque lo hacíamos fatal).
Así que ole por todas esas madres que compaginan las dos cosas que sois muchas, ole por la mami médico del post y ole por mi señora madre.
No tengáis miedo que no nos morimos por que no nos dejéis dormir en la cama o no nos llevéis al colegio. Sois maravillosas.

En otro post os cuento el drama de un divorcio hace 20 años y como todo el mundo la dio la espalda y el de cuando nos apuntó a fútbol y karate en vez de a ballet y sevillanas.

Besis de fresi.
Una hija orgullosa de su súpermami