Esta semana santa me ha pasado una cosa que he alucinado.
Me llevaba regular con mi suegra porque se metía en todo, todo, hasta en las sábanas y toallas que compraba. Como táctica para que esto dejara de suceder, porque estaba ya afectando a la relación con mi marido, decidí hablarle y verla lo menos posible, y siempre siempre tratarla con una exagerada educación
Con esto se acabaron las discusiones y he ganado en paz mental.
Bueno la semana pasada nos fuimos de vacaciones al piso que tienen mis suegros en la playa, si hemos salido poco con el temporal pero bueno, la cosa es que sabía por mi marido que lo habían reformado y cual ha sido mi sorpresa al ver que los dos baños y la cocina son idénticos a los míos, pero todo igual hasta los adornos.
No os imaginais lo que me ha afectado, siempre me ha criticado cuando he decorado la casa, pero en mi cara me lo decía, «uy que cocina más fea» «esos azulejos tan coloridos para el baño no pegan» y cosas así, ya os digo que dejé de contestarle, pero ahora llego y veo que me ha copiado todo lo que me criticó y estoy que me subo por las paredes.
Se me ha ido la paz mental, tengo unas ganas de verla para decírselo.