Buenos días bellas sirenas, antes de nada, gracias por pararos a leerme.
quería comentaros una cosa que hasta ayer no me di ni cuenta que me había pasado en la adolescencia.
Gracias a leeros he entendido mejor mi vida hasta ahora. Os explico por qué:
Ayer me cruce por casualidad con el primer chico que me gustó en el instituto. A la tierna edad de 12 años empece el instituto en un pueblo cercano al mío, era un instituto de varios pueblos así que se habría un mundo de gente nuevo ante mi (siempre había sufrido bulling, no cambio aquello hasta los 16). Al poco tiempo, conocí a este chico, a parte de que me parecía guapísimo era super majo, cariñoso, simpático, lo tenía todo :) Como era de esperar me terminé pillando por él. Él se enteró y siguió siendo el chico simpático, cariñoso pero solo si estábamos solos, si estaba con sus amigos la cosa cambiaba, empezó a ignorarme para acabar metiéndose conmigo (la gorda, jaja). Dejamos de hablarnos a mi se me paso la tontería y a otra cosa. Debo decir que no me fue mejor después.
Ayer me le cruce, y toda la etapa de instituto volvió y entonces recordé conversaciones, momentos. Recordé que poco antes de que nos dejáramos de hablar definitivamente hubo una excursión, en aquella excursión me dijo que le gustaba pero que no podía por sus amigos. Entonces no entendí nada, como no entendía que siendo él el que me insultaba se ofendiera porque a mi pareciera no ofenderme.
Tras aquello se me vienen a la cabeza algún chico más, que mientras a mi me decía cosas bonitas, se reía con sus amigos.
Al principio llegué a pensar que me inventaba las cosas. Luego simplemente se me olvidaron.
Ahora sigo siendo gorda, sigo teniendo mis complejos, sigo teniendo mis miedos pero gracias a muchas de vosotras he entendido que no estaba loca, que existe demasiado miedo al que dirán.
Gracias por hacer de este mundo un sitio mejor.