hola!!! la verdad es que no suelo escribir, soy mas de leer, soy la vieja del visillo jajaja, pero me ha parecido que gritabas y nadie te escuchaba, y eso es duro/triste.
Siempre me había considerado una persona con dificultades para entablar una relación del tipo que fuera, pero hace unos años, por necesidad, me tuve que alejar de mi zona de confort por trabajo. es ahí cuando comencé a ser mas abierta, porque era eso o deambular por ahí sola, y aunque me gusta estar sola, también me gusta saber que tengo la opción de socializar si quiero.
En una de esas veces que me moví por trabajo, me enamoré locamente de mi jefe….jaijai qué idea más buena!!!! cabe decir que por aquel entonces yo tenia pareja, pero no era un amor sano, y aunque hice las cosas al revés, lo solucioné y nadie salió herido, a excepción de mí, el karma me debe tener en el TOP5 para joderme…jajaja
El caso es que al principio parecía estar en mi misma onda, me visitaba de sorpresa para pasar su cumpleaños conmigo, me hacía regalos, conocí a parte de su familia, vamos, que me trataba como la puta reina que siempre he sido, claro que por aquel entonces no era tan consciente…:( Comenzó a tornarse en una relación a la que nunca sabía como denominar, eramos amigos?follamigos?? No-novios???que cojones éramos???!!! me vi envuelta en una de esas relaciones de mierda, de esas de «ni contigo, ni sin ti», y aunque al principio me era suficiente, después de un tiempo quise más que eso, y ahí fue cuando se complicó la cosa, yo le hice saber mis sentimientos y demostrárselos, él a veces se alejaba sin motivo aparente, y otras me buscaba, cosa que no entendía, pero él nunca había hablado claro, sólo se dedicaba a confundirme con sus palabras y actos. de repente sentía unas irrefrenables ganas de estar conmigo, y otras me daba la espalda sin explicación alguna, no entendía nada, y fue así como tras el paso del tiempo comencé a culparme del fracaso de la «no-relación», revisaba una y otra vez cada momento, cada conversación, tratando de encontrar el punto exacto donde la cagué tanto para que la cosa se estancara…pensé incluso que yo no era suficiente para él. Lloré desconsoladamente noches enteras, pensé que jamás encontraría a alguien que me llenara tanto como él, yo nunca había sido una chica resultona en ningún aspecto de mi vida así que supongo que me aferré más a el por ese hecho, por fin alguien se fijaba en mi!!!! Pensé en pequeñas estratagemas que quizás podían hacerle ver que yo era la mujer de su vida, pero no fue algo permanente. de un día para otro estábamos bien, al día siguiente desaparecía sin dejar pistas, y el circulo volvía a empezar, yo volvía a culparme etc y cuando mas tranquila estaba, ahí volvía a aparecer mi fantasma, era casi una vez al mes, era mi «monstruación», era el recordatorio de rigor para que supiera que él seguía existiendo…por supuesto, cada vez que volvía, aunque me había prometido a mi misma no volver a caer con la misma piedra, se me caían las bragas con tanta fuerza que hacía un agujero en el suelo. y este círculo se repitió durante años, yo por trabajo, y por esa estúpida premisa de que no había nadie como él, no me permití conocer a nadie más, aunque se comportaba como un cabrón, no había nadie mejor.
Después de un tiempo seguía apareciendo en mi vida esporadicamente, y yo le volvía a dejar entrar, bajo el pensamiento de «esto es solo para un rato, ya sabes que es un picaflor de manual, es uno de esos a los que la p**** le va más rápido que la cabeza, disfruta cuanto dure, y después a otra cosa mariposa», por supuesto siempre acababa jodida por a por b.
Y así hasta hace unos meses, me decidí a meterme en una app(AUT para ser exacta), al principio sólo era una forma de pasar el rato y divertirme, no tenía intención de quedar con nadie, la verdad es que creo que tuve suerte, porque pocos fueron los babosos que practican la pesca de arrastre los que me encontré, o quizás eran más sutiles….no idea, pero con el tiempo me animé a quedar, y bueno, como experiencia vale, pero no había nadie que me llenara, quizás tampoco di el suficiente tiempo para que las chispa surgiera…pero me di cuenta de que de verdad había más peces en el agua, y que aunque me costara, igual dentro de ese amplio abanico de posibilidades que de repente tenía enfrente estuviera mi persona. Estuve un tiempo conociendo a diferentes chicos, pero el final del día siempre era igual, desanimada y sola. Decidí que no podía vivir obsesionada con la idea de encontrar a alguien especial, que tenía que aprender a vivir conmigo misma, y ser feliz sola, porque al final lo único que queda al final del día es un@ mismo. Comencé a valorarme, y a no dejar que nadie me hiciera pensar lo contrario, resurgí de mis cenizas, había tocado fondo para coger impulso, nacía una nueva yo. En este punto de mi vida estaba bien, no necesitaba nada (a excepción de un buen trabajo donde no me explotaran, pero ese es otro asunto…jajajaj), dejé de quedar con chicos y a disfrutar de mi soledad, hasta que un día, contactó conmigo uno de esos chicos con los que hacía tiempo que había quedado, recordaba que había sido una de mis mejores citas, no paré de reírme en toda la cita, no hubo silencios incómodos, parecía que teníamos 1000 y un puntos en común, pero…no acabó de convencerme,por eso me sorprendió que volviera a retomar el contacto conmigo, volvimos a quedar varias veces, me escuchaba, me hacía reír, se comportó como un caballero… no fue hasta la 5ª cita cuando fuimos a su casa, y pasó lo que pasó, después de eso seguimos quedando pero yo seguía indecisa. A los dos meses de quedar seguidamente, me ofrecieron un trabajo donde ya había estado, y que era fuera de donde vivo, solo dos meses, pero…y adivinad quien estaba allí!!! si! el retromongol de turno, pero me prometí que no quería cargar con el lastre del odio después de todo lo que me había hecho llorar, y que me iba a comportar como la profesional que soy, nos llevábamos bien, hasta que en un momento dentro de esos meses comenzó a tratarme como el peor bicho descubierto por el hombre, yo no entendí nada, y eso me hizo volver a llorar, era muy incomodo trabajar con ese ambiente, y más cuando no había hecho nada malo, claro que luego supe el motivo y algo tenía que ver con que viniera a verle su «novia» jajajaj(otra ilusa como yo que era consciente de sus deslices y que pensaba que con ella iba a ser diferente) le habría advertido sobre su modus operandi, pero solo hubiera conseguido ser la ex rencorosa y envidiosa, así que decidí callarme puesto que no soy el pepito grillo de nadie, y cada uno tiene pelos en los huevos para tomar sus propias decisiones y acarrear con las consecuencias. Después de ese incomodo capitulo, todo volvió a la normalidad, pero yo ya había tomado mi propia decisión, y esta vez era permanente, había tenido suficiente, no lo quería en mi vida de ninguna forma, en los últimos años no había sido ni amigo, ni nada, sólo alguien que había jugado conmigo sabiendo todo lo que yo llevaba dentro. Decidí que era hora, no de pasar página, si no de cambiar de libro, y así fue como cuando volví a mi ciudad retomé mi historia con el «chico adopta», sin mirar atrás, sin miedo, disfrutando cada momento. Dentro de un mes nos vamos a vivir juntos, y no tengo miedo de hacer este salto, no lo hago sola, él está conmigo y es realmente maravilloso, y si me pego la ostia (cosa que dudo), me volveré a levantar como he hecho siempre, pero no puedo dejar de saltar por miedo a hacerme daño.
Y yo quería que esto iba a ser corto….jajaja y aún me he dejado muchas cosas en el tintero, pero si me he decidido a contarte esto es porque yo en algún momento me he sentido como tú, he sentido que gritaba y nadie me escuchaba, he estado rodeada de gente y me he sentido más sola que nunca, he pensado que yo no había nacido para ser feliz, que siempre estaría sola porque el amor de mi vida no veía que yo era el suyo… y un sin fin de sentimientos de mierda, pero de todo se sale, y si no te ves con fuerzas de hacerlo sola, busca ayuda, no es una derrota, es algo muy sano. Pero sobre todo, no dejes que esos pensamientos de mierda controlen tu vida, plántales cara, y busca motivos por los que sonreír, si haces un pequeño esfuerzo, los verás, a veces esos motivos para sonreír se esconden en los pequeños momentos cotidianos, nos obsesionamos con encontrara grandes motivos, y nos olvidamos de los que tenemos enfrente, aunque también puedes permitirte tener algún día de bajón, porque estar de bajón es humano, pero procura que sean los menos. Rodeate de la gente que te quiere, de gente que te sume y no te reste, libérate de relaciones toxicas, obligate a ti misma a retomar todo eso que sabes que te gusta y te hace bien, a salir de tu zona de confort, a vivir, a arriesgar, de cada experiencia te llevaras algo bueno siempre, no tengas miedo de saltar, quizás en alguno de esos saltos llegues a volar, y amiga, las vistas desde aquí arriba son magníficas!!!!

Hola,

La última chica que escribió, L, me podéis pasar su email? Me gustaría hablar con ella, si está interesada.

Gracias.