Hace un tiempo me dijeron que me quería poco por compartir una imagen de un tablón comparándola con mi cuerpo y unos emoticonos de risa. ¿Es que necesito verme guapa/buena para quererme? Tengo cuerpo cilindro, siempre lo he tenido, esté más flaca o más gorda, mi cuerpo tiende a ser un cilindro, uso una 80 B. Y tengo estrías y las costillas deformadas. Es así, punto, no voy a negar cómo soy, me considero guapa en general, pero un tablón. ¿No me quiero por decir mis defectos físicos? Quererse es aceptarse como uno es.

Además, durante mi infancia me he querido muy poco, y no por fea precisamente (aunque opinase que lo era). Yo quería tener dones de gente, ser de estas personas que te alegran el día con sólo oír unas palabras suyas, poder controlar mis llantos que no venían a cuanto (los cuales me planteo que fuesen depresión infantil). Además, una de las cosas que más coraje me daba de mí era mi pelo, no por como es, sino porque siempre me ha gustado ir limpia, peinada y arreglada (no ir guapa, me refiero a lo que se llama con unas pintas decentes) y eso como que nunca lo conseguía, ya que no sabía cuidar mi pelo. Luego ya lo acepté tras descubrir las horquillas y las pinzas, lo recogía como si fuera una gimnasta y al menos ya no parecía amante de meter los dedos en el enchufe/hippie de las que no se lavan.

En la adolescencia seguía igual, ya aprendiendo a llevar el pelo decente, maquillada de un modo ridículo (mi madre me daba dos euros si lo hacía, y pues a parches de corrector que iba), pero anhelando tener dones de gente, caer bien y ser buena estudiante. En aspecto me bastaba con ir de negro para sentirme contenta conmigo misma, y quería cadenas, pinchos y demás porque 2005 fue una época muy oscurita XD

Ahora que soy adulta sigo anhelando lo mismo, carisma, don de gentes, ser fuerte, valiente, decidida, buena estudiante, tener dominio de mis emociones. Entiendo que cuanto mejor luzca una mejor, pero a la hora de la verdad, cuando estoy sola anhelo ser «strong in the real way».

Resumiendo y dejando bien claro a donde quiero llegar, no se trata de todos somos hermosos, vamos a sentirnos bien con nosotros mismos; sino mejoremos como persona, aprendamos y dejemos el aspecto en segundo plano, porque yo, visto lo visto, a la larga, los problemas no dependen de si se es bonita o no (normalmente). Yo era una cucada de peque aunque no me diese cuenta y recibí acoso y estaba muy sola, por no saber tratar a la gente y ser repelente a lo Hermione Granger de niña con tal de intentar aparentar que valía, cuando en realidad valemos por el mero hecho de aportar algo bueno a los demás. A mí mi cara bonita nunca me ha arreglado mis problemas, mover el culo y hacer algo sí.