Si algo hay que me apasiona es leer vuestros follodramas. Y como no, aquí vengo a compartir el mío.
A mi novio y a mí nos gusta el sexo duro y después de alguna discusión es el triple de salvaje.
Corría una tarde de discusión por gilipolleces y como buenos intensitos terminamos solucionandolo hasta con lágrimas en los ojos.
Ya nos conocemos, la reconciliación sería equiparable al drama que nos habíamos montado.
Empezamos con besos pasionales, que si te muerdo el cuello cual vampiro sediento, que si jalon del pelo, y esos labios que piden a gritos morderlos como si fuesen de goma aunque nos arrepintamos después de vernos las marcas y los morados…
Me puse yo encima y en mi momento de gloria cuando me corría le agarré y le clavé mis súper uñas acrílicas y en punta, ojo al dato, en el cuello y MEEEC ERROR! vi su cara de dolor y querer mandarme al infierno, (hacía dos días que se había tatuado la nuca y la cabeza). Pues como no después de tal corte de rollo no nos damos por vencidos, volví a ponerme encima y mientras el me mordía los pezones se atraganta con su propia saliva y yo con cara de póker -¿Mmm estás bien? ¿Un poco de agua tal vez?
Seguimos sin darnos por vencidos haciendo una garganta profunda yo acostada en la cama boca arriba, él dale que te pego emocionado hasta que me dan arcadas le aviso para que pare y ni se entera, pues si amigas, noté como me subía todo listo para asfixiarme con mi propio vomito a lo 100 maneras estupidas de morir. No sé como conseguí evitar que no saliera, que horror.
Intentamos alguna postura rara de las que nos gustan pero no había manera, más descoordinación que en Sálvame.
Decidimos pasar al anal y yo notaba como tremendo trabuco me llegaba a los intestinos, nos corrimos maravillosamente y cuando nos damos cuenta, me había sacado un pequeño moñigo que cayó en la cama. Madre mía que desagradable, no podemos esperar que me salgan diamantes del culete…
Bueno menos mal que decidimos terminar ahí, no quiero saber que sería lo próximo que nos pasaría.
Mientras nos duchamos en un silencio incómodo lo miré con cara de asco y le dije vaya mierda de polvo, asintió y nos reímos a carcajadas