Buenos días, eres una campeona, una superviviente, una mujer fuerte y bella que ha tenido la desgracia de encontrarse con un ser malvado que le ha destrozado muchos años de su vida, pero ya te has dado cuenta de que esto no puede seguir así junto vas a tomar las riendas de tu vida y aunque al principio va a ser duro después va a ser más feliz de lo que nunca lo ha sido, volverás a ser tú misma y empezarás a disfrutar de la vida. Dejar a alguien es muy duro, es muy difícil y tus circunstancias son muy jodidas así que es normal que estés preocupada, en primer lugar a ver qué te dice el psicólogo o la psicóloga, pero una de las cosas que quizá puedes hacer es dejar de quedar con él, alejarte de él, porque no vivís juntos. Y menos mal entonces cuando él te proponga quedar, pues a lo mejor tú no puedes quedar sería por la tienes otra cosa que hacer con tu madre o cualquier excusa ir alejándote físicamente y no estar con el. Que cuando el te diga qué pasa después de dos o tres veces que hemos quedado con el coma le dejes o por teléfono o algo así, intenta no verle más. No juntarte con el, especialmente a solas. En un pueblo puede ser difícil no verse, pero intenta siempre ir acompañada, bien sea yendo o viniendo del trabajo, pídele ayuda a alguna compañera, o yendo a comprar con tu madre. No sé si mi recomendación es muy tonta pero es lo que se me ocurre. Y bloquearlo en todas partes. Muy importante. Para que no te pueda comer la cabeza y convencerte. En cualquier caso te envío un abrazo enorme

Hola, lo primero de todo, espero que estés bien. Me gustaría contarte un breve resumen de mi historia, porque estoy segura de que, en esta situación, te animará a dar el paso de deshacerte de tu maltratador y ser libre.

Mis últimos tres años me los he pasado conviviendo con un hombre del que me enamoré muy rápido. Con la convivencia descubrí que es un alcohólico y un cocainómano en la sombra. Esta persona me ignoraba durante el día (a no ser que necesitara de mí favores), me odiaba por las noches y me amaba por las mañanas muy arrepentido. El maltrato psicológico lo intuyes, lo sientes, pero no sabes cuándo empieza. Cuando ya lo sientes, ya estás atrapada y, como tú, no ves salida. Pero, tranquila, que salidas hay muchas.

Intenté dejar a este personaje 2 veces y cometí el error de intentar sentarme a hablar con él y hacer las cosas bien hechas, como adultos. Una persona que te maltrata no te quiere, eso tenlo claro. Miéntete las veces que quieras y créete sus falsas promesas «voy a cambiar; ese no soy yo; yo te quiero», pero en el fondo sabes que te estás menospreciando por duplicado: 1) dejándote engañar por él (la gente no cambia así como así) y 2) no importa cuánto te humille o te hiera, porque él sabe que seguirás ahí aguantando aunque estés exhausta.

No fue hasta que me pegó, que decidí irme de casa, preparar todas mis cosas e irme. Pero volví a cometer el error de escucharle y verle llorar prometiéndome lo mismo. Volví a caer en su trampa. Repito, una persona que te maltrata (sexual, física o psicológicamente no te quiere y, añado, eso es un monstruo). Seguí conviviendo con él durante más de un mes. La primera semana era un amor, el novio perfecto. Los días pasaron y volvía a ignorarme durante el día, odiarme por la noche y amarme muy arrepentido por su actitud agresiva durante la madrugada. Pero esta vez era diferente. Amenazas de muerte más a menudo, sus enfados eran cada vez mayores solo conmigo por auténticas gilipolleces que tenían solución (todo se puede solucionar menos la muerte). Sus problemas en el trabajo, en la vida, con la gente a su alrededor los pagaba conmigo al final del día y yo ya sólo pedía en silencio que se calmara y se durmiera y que no me hiciera nada.
No quería ir casa, sentía pánico por si me mataba. Por si ya no volvía a ver a mi familia y mis amigos. En mi trabajo estaban al tanto de la situación que vivía en mi casa con mi pareja, así que avisé de que mi pánico era extremo y lo dejaba. Esa mañana cogí todo lo que pude, cargué mi coche y sin avisar a nadie de mi círculo en aquella ciudad volví a mi ciudad natal. No dejó de llamarme a mí y a mi familia «super preocupado» por mí…sólo quería saber dónde estaba, dónde había ido…
Me pidió una explicación de porqué le dejaba, porque «no entendía nada». Un maltratador jamás se ve a sí mismo como tal, por eso:
– Un maltratador seguirá siéndolo, pues no se reconoce como tal.
– Una persona que no te quiere, le das completamente igual mientras sigas ahí disponible para él y no te vayas ni muy lejos, ni con nadie nuevo.
– La primera persona a la que debes querer y en la que debes pensar siempre es en ti misma. Si una persona te resta, ¡patada! y a seguir.

Esto sucedió hace dos meses y desde entonces ni le echo de menos, ni pienso volver a sus brazos. Identificar que estás siendo maltratada es bueno, pero dejar a tu maltratador es el verdadero paso para iniciar tu camino hacia tu libertad, tu identidad y tu individualidad como ser humano. Cualquier cosa o persona que atente contra esos tres conceptos, ni te quiere ni se merece tu querer, ni tu tiempo, ni tu cuerpo, ni nada tuyo, ¡ni siquiera explicaciones de por qué le dejas! Te dejo y punto!!

Un saludo y te deseo tanta fuerza y valor como necesites para salir de esa persona que te está matando en vida.