Escribo esto un poco a modo de desahogo, porque si le empiezo a dar vueltas y actúo en consecuencia, termino en los sucesos.
Y es que resulta que se me empiezan a acumular los dramitas laborales y para narraros mis desdichas, os pongo en contexto. Hace un tiempo dejé mi trabajo anterior en una gran cadena, donde los derechos laborales carecían por su ausencia, los trabajadores iban a trabajar con problemas médicos tochos, con partes del cuerpo rotas… En fin, les faltaba darte un poco con el látigo para terminar de cubrir el servicio esclavitud.
Por suerte, hará un tiempo, con muchos cambios por en medio, encontré un nuevo curro en un comercio muy pequeño, las condiciones, a priori, eran buenas, el jefe, muy muy majo, y no había ningún problema, hasta que empezaron a pasar ciertas cosas.
La primera de ellas es que yo empecé el trabajo muy animada, quería darlo todo y que la empresa fuera bien, así que si me tenía que quedar más tiempo para hacerlo todo, lo hacía, si tenía que trabajar más, no me quejaba… Hasta que la temporada en la que empecé, que coincidía con un festivo importante, dejó de dar dinero.
De repente, la gente que compraba tanto, ya no lo hacía y yo empezaba a vender menos, con ello, a tirar más horas y a intentar hacer algo por el negocio.
En ese tiempo, me empecé a dar cuenta de que solo se me felicitaba cuando vendía mucho y que cuando vendía algo normal o poco ni se me contestaba, que el tiempo que estaba tirando de gratis ni se me valoraba (y ya no hablo de pagarme esas horas, no), hice alguna «formación» que consistía en quedarme currando gratis y así con un montón de horas que me han rascado, cuando mi jefe llegaba tarde y me tocaba quedarme 1 o 2 horas reponiendo las cosas que había traído fuera de tiempo…
Para más inri, también he visto que mis nóminas no varían de un mes a otro y, para colmo, cobro menos de lo que indica en ellas, es decir, si tuvieses que cobrar 600 euros al mes según nómina, yo cobro 587 de forma sistemática.
Por no hablar ya de dos problemáticas que me han surgido nuevas, la primera tiene que ver con las vacaciones, donde se están haciendo los locos a más no poder, llamadas que no me cogen, largas que me dan, no darme respuestas… A eso sumado que mi compañera me dijo que me iba a cubrir unos días de vacaciones (independientes de los de la empresa) hacía meses y al final resulta que no, y me entero a semanas de esto.
Y ya, para terminar de colmar el vaso, me deben dinero de un domingo que fui a trabajar (sin yo poder porque eso cuentan como horas extras y mi jornada ea de lunes a viernes sin tener convenio para hacer esas horas) y ahora me piden que trabaje un domingo festivo mañana y tarde.
Y es que ya estoy cansadísima, por una parte, porque me están poniendo entre la espada y la pared, porque estoy cansada de ir detrás y que no me hagan caso y porque me cuesta gestionar conflictos y a mí esto ya me está generando mucha ansiedad. Y porque no tengo los ovarios de plantar cara y enviar a todo el mundo a la mierda, que es lo que se merecen, encima voy pensando en formas suaves de decir las cosas en cuanto se están riendo de mi cara y me dan largas y me siento mal, porque en este sitio trabajo muy a gusto, de verdad, y la gente es excepcional, pero me jode que se me vulneren derechos básicos, como el derecho a que me paguen.
Con esto, la verdad no sé qué busco, supongo que un poco de comprensión. Para las que me digáis que vaya a un sindicato, ya lo he hecho, pero aun así, no me quedo tranquila, porque quien está dando la cara todo el rato y dando por culo para que me den una respuesta soy yo y me afecta mucho y, la verdad, ya me pasa hasta por la cabeza dejar de reclamar nada, si total, parece que van a cerrar más pronto que tarde, pero joder, eso es mío y me pertenece y me jode la vida que haya personas que se vean en la posición de poderse reír de mi mano de obra.