Hola chicas.
Os leo desde hace tiempo pero nunca me había atrevido a escribir nada, pero ha llegado el punto en el que necesito opinión. (Empatía, por favor, no pido más.)
Os pongo en contexto:
En agosto de 2021 conocí a un chico por Tinder. Nunca he sido partidaria de las apps de citas pero por buscar algo nuevo probé. Desde el primer momento la conexión fue brutal: compartimos aficiones, somos super sarcásticos, los dos buscábamos una relación estable…
Ese primer día nos dimos los números y nos pasamos hasta las 4 de la mañana escribiéndonos por whatsapp. Él me decía una y otra vez que tenía muchísimas ganas de que nos viéramos y ver así si la conexión que había online la había también en persona, siempre sin agobiar ni forzar nada.
Como soy una persona bastante insegura de mí misma y trabajo en una cafetería le propuse que viniera una tarde a tomar un café y así ponernos cara. A los dos días vino, y al irse juro que me temblaban las piernas y él me escribió lo mismo y me propuso recogerme cuando saliera y que nos tomáramos algo.
Pues bien, desde ese día hemos hablado TODOS y cada uno de ellos, bien por WhatsApp, bien por teléfono…, Nos hemos visto al menos dos veces por semana, TODAS las semanas. Como él vive sólo quedamos en su casa, y desde la tercera o cuarta vez que me quedé a dormir allí me dio las llaves de su casa cuando se iba a trabajar para que yo pudiera quedarme un rato más en la cama.
Es un chico increíble, íbamos al mismo ritmo, buscábamos la misma relación estable, hasta que en febrero un día me dijo que quería hablar conmigo porque «necesitaba distanciarse». Es decir, que hiciéramos relación de amistad y ya.
Me dolió muchísimo porque todo era recíproco, no eran paranoias, él mismo lo decía. Congeniamos muchísimo en el sexo, cosa a la que le doy bastante importancia porque soy muy activa y disfruto de él.
Pues bien, desde entonces NADA ha cambiado: hablamos de ir quedando para ver cómo iba fluyendo todo y el resultado ha sido que continuamos hablando todos todos los días, seguimos teniendo sexo, me sigo quedando a dormir con él, sigo teniendo la llave de su casa…
Y estoy en un momento en el que estoy hecha un lío porque sus actos no encajan con lo que dice.
Cierto es que me da miedo preguntarle y sacarle el tema porque la inseguridad me genera muchísima ansiedad y tengo miedo de que desaparezca de mi lado, aunque él dice que nunca lo hará.
No sé si el concepto se entiende bien, pero ojalá alguna pueda decirme «algo» para ver cómo seguir con esto.
Gracias a todas.