Chicas, necesito vuestra ayuda para ver qué puedo hacer con el panorama que se me presenta.
Desde hace un par de años estoy viviendo con mi pareja, nos vinimos a vivir juntos a los meses de conocernos, teníamos las cosas claras, somos adultos y queríamos que si iba a salir mal que saliera mal cuanto antes.
Vale, la convivencia nos costó un poco, acomodarnos el uno al otro no fue fácil, pero ahora por fin puedo decir que estamos mejor que nunca, que en casa me siento en paz y que me encanta llegar y que esté él.
Bien, tiene una hija, lo sé desde el principio, la niña es monísima, no termina de ‘quererme’, pero nuestra relación mejora poco a poco. Bien, tiene trece años, está en la edad del pavo y ha dicho que se quiere venir a vivir con nosotros porque su madre no la deja hacer todo lo que quiere.
Cuando lo planteó nadie la tomó muy en serio o al menos yo no lo hice, pero anoche me dijo mi chico que se lo estaba pensando de verdad, que le encantaría tenerla más cerca y que tenemos la habitación de invitados (en la que siempre se queda cuando viene) y que la podríamos adaptar para que fuera totalmente suya.
Y a ver cómo os digo esto sin sonar a hija de fruta… No quiero que viva con nosotros, no quiero lidiar con una adolescente a diario, no quiero dejar de llevar la vida que tenemos ahora mismo porque aparezca ella en el mapa.
Anoche le dije que no me hacía mucha gracia la idea y me dijo que entonces igual se tenía que plantear irse a otro piso con ella… y claro, eso tampoco lo quiero.
No quiero que él se vaya y no quiero que ella venga. Unos días estupendo, pero meterse aquí a vivir los 365 días del año… pues como que no.
¿Qué opináis vosotras? ¿Qué hago?