Escribo esto a modo de desahogo. Siempre he sido una chica introvertida, tímida y socialmente pasota (sigo siendo tímida aunque menos que antes y lo otro sigue igual, será mi naturaleza). Así pues, nunca me han sobrado las amistades, aunque en la adolescencia tuve mi círculo. Sí, hablo en pasado, de aquellas personas no conservo a nadie, unos por distanciamiento y otros por disputas. Desde que fui perdiéndolos no he sido capaz de solidicar una amistad y mantenerla en el tiempo, solo esbozos de la misma, gente de paso.
La última puñalada fue literalmente la desaparición de una «amiga» al decidir centrarse cien por cien en su pareja (quien irónicamente siempre se ha quejado también de no conservar las amistades) . Con las pocas personas con las que cuento actualmente (pese a que ahora no tengo queja) no auguro un fin muy diferente. Lo creo así porque siempre es la misma historia y porque tampoco son amigas íntimas por quienes ponga la mano en el fuego.
Con todo, lo peor que me estoy llevando de esto más que el hecho en sí, es la crisis de autoestima que me está causando. Veo a mi novio, todo lo contrario a mí, súper extrovertido, con sus amistades férreas desde la adolescencia, y es notorio que se adoran. Y aunque me alegro mucho por él, también siento envidia. ¿Por qué todo el mundo, en mayor o menor medida, conserva alguna amistad y yo no? ¿Tan insulsa, poco interesante y/u horrible soy? Por no hablar de que si cortáramos, ya sí que estaría más sola que la una.