Hola! De una celiaca a otra te recomiendo que te dejes de miedos. Lo primero de todo es decirte que no debes sentir ninguna vergüenza por la celiaquía y las consecuencias de comer algo con gluten o contaminado, ya que se trata de una enfermedad y eso en ningún caso es avergonzante.

Entiendo tus dudas y tus miedos a la hora de conocer a otras personas, pero desde mi experiencia te diré que creo que cuando alguien tiene verdadero interés en ti, le importa tres pitos este tema. Yo siempre que he conocido a alguien he avisado de esta condición para dar tiempo a que salgan corriendo si es lo que quieren hacer, porque sé que, aunque parezca mentira, hay personas para las que esto es un problema. Sin embargo, tengo que decir que nunca he tenido una mala experiencia.

Con mi novio la situación siempre ha sido fácil. Supongo que porque había verdadero interés por parte de ambos. A él conocerme le sirvió para interesarse por la enfermedad y tomar conciencia. En casa comemos todo sin gluten para evitar la contaminación cruzada y cuando salimos a cenar, la mayor parte de las veces terminamos pidiendo todo para compartir. Con esto te quiero decir que, quien tiene verdadero interés se adapta.

Sé sincera, habla con él de las consecuencias que puede tener la contaminación cruzada para ti y explícale las normas básicas. Si no lo entiende, es que no merece la pena.

Hola! Te cuento, mi pareja sufre la enfermedad de Crohn, es celiaca y la lactosa no la tolera muy bien tampoco. Cuando la conocí le pasaba como a ti, miedo al rechazo por las complicaciones de su enfermedad y vergüenza por los síntomas. Te diré lo que la dije a ella, tú eres mucho más que tú alergia al gluten y quien no lo vea así no te merece. Al final este tipo de cosas son filtros rápidos para descartar idiotas, si les parece demasiado tener cuidado con cosas que a ti te hacen mal significa que tan majos, maduros o buenos partidos no son. Llegara alguien que no lo vea así y tendrá todos los cuidados del mundo. Tu habla siempre, cuéntalo todo y no tengas vergüenza en explicar que hay que lavarse los dientes después de comer gluten o tener cuidado con la contaminación cruzada. Por desgracia los que no somos celiacos ni hemos tenido a alguien cerca no tenemos muchas veces esa información y es mejor siempre explicarlo de primeras. En cuanto a los síntomas, llegará alguien que te haga sentir lo suficientemente cómoda o tú te querrás lo suficiente como para no verlo así. No pasa nada! Es lo más normal del mundo! Todos vamos al baño, todos nos hemos sentido indispuestos alguna vez o con gases o con el estómago inflamado es algo tan normal como la vida misma! Y quien no lo vea así y te haga sentir mínimamente incómoda no merece ni un segundo de tu tiempo. También decirte que hoy en día, por suerte, hay restaurantes que cuidan la contaminación cruzada, marcas en el mercado sin gluten y más, así que quien te ponga la excusa de “es demasiado lío” que se quede en su casa y tú no descuides jamás tú salud por quien no lo merece. Mucho ánimo!

A ver, si no es un niñato como dices no tienes que preocuparte por du reacción. Dile que es como una alergia, a nadie se le ocurriría besar a un alérgico a marisco, por ejemplo, despues de comerlo.
Y de todas formas no veo que tenga que haber una contaminación cruzada por vivir en su casa, simplemente tened cuidado y ya está. Es necesario que conozca muy bien los alimentos que pueden contener gluten y listo.

De verdad que la gente se complica la vida con unas tonterías…. y no lo digo por tu celiaquia que no es ninguna tontería. Si no por la gilkpollez de no querer decírselo al otro. Que eres celiaca no tienes sida. Problemas del primer mundo.

De una celíaca, con intolerancia a la fructosa, lactosa, sorbitol y alérgica a los ácaros entre otros problemas de salud… Quién quiere interesarse por tí, verá más allá de los problemas. Hay gente más superficial y otra que no lo es. Hay gente que donde ve un problema, otro ve una solución. Si se quiere, se puede. Y jamás te disculpes oye sientas mal por tener esa enfermedad. Bastante tenemos con ella como para culpabilizarnos por algo de lo que o tenemos culpa.