Llevo mucho tiempo leyendo en muchos foros y webs a mujeres que se quejan porque sus parejas ponen el grito en el cielo por no querer colechar. Parece que siempre somos nosotras las que valoramos mucho más eso de dormir con nuestros hijos, y me siento como un bicho raro porque en mi caso es al revés.
Mi hija tiene ya casi 5 años y tan solo he conseguido que duerma sola 3 noches de su vida. A base de levantarme continuamente a atenderla y darle mimos, pero al menos pude hacer que amaneciese en su cama y no en la nuestra. Lo que os digo, 3 noches, hasta la cuarta cuando le pedí a su padre que se encargara él esa noche porque yo no podía más del cansancio. Y a la primera de cambio la volvió a traer a nuestra cama.
Me enfadé y le dije que ya que boicoteaba mis intentos, me negaba a volver a intentarlo. De esta manera han pasado los meses y así seguimos. No digo que no descanse o que duerma mal a gusto, pero creo que llegada una edad cada uno debe tener su espacio. A mi marido parece darle todo igual y creo que él a día de hoy no es capaz de dormir sin su hija al lado. Todo esto me frustra un poco porque me da la impresión de que nado a contracorriente.