Si eres como yo, que las tareas del hogar te parecen algo un pelín aburrido y que las haces, básicamente para que tu casa no parezca la selva del mismísimo Tarzán. Te voy a dar una serie de trucos para poder llegar a todo sin morir en el intento y sin que tengas que cargarte de tareas cada día.

A continuación, te cuento cómo:

    • Establece el tiempo: lo primero de todo, será que establezcas el tiempo diario que puedes dedicar a las tareas del hogar. No tiene que ser igual cada día. Quizá hay días en los que puedes dedicar dos horas y media, y otros en los que apenas puedas dedicar 40 minutos. Pero es primordial hacerlo y respetar el tiempo establecido.
    • Descarga un planning de tareas: en la web de Pinterest tienes miles, por ejemplo este. Esto te servirá para tenerlo todo anotado y organizarte mejor. En este planificador deberás anotar todas las tareas tanto las diarias, como las semanales o las quincenales. Eso dependerá de cada casa y de las personas que la habiten en ella.
    • Establece la duración de cada tarea: siendo realista, obviamente. No puedes decir, limpiar el baño a fondo 5 minutos, porque, a no ser que seas el Correcaminos, no lo harás en ese tiempo. Pero, en 5 minutos sí que le puedes pasar el trapo al lavabo y al WC, limpiar el espejo y barrer, y así lo mantienes limpio por más tiempo.
  • Deja siempre un hueco para tareas imprevistas: por ejemplo, una noche que tengas visita para cenar, al día siguiente te tocará un tiempo extra en las tareas. Si lo sabes con antelación tenlo en cuenta en tu planificación semanal y, si vienen por sorpresa, deberás quitar tiempo a tus tareas ya establecidas. Es por eso, que deberás dejar huecos libres de tiempo durante la semana para poder reubicar las que queden pendientes de ese día.

Como ya tendrás establecido el tiempo diario que puedes dedicar a las tareas

  • Divide las tareas: haz una diferenciación entre aquellas tareas que te sean más agradables de hacer y las que menos. Una vez lo tengas, haz primero las que sean más tediosas para ti y luego las menos. De esta forma, no te dejas lo peor para lo último, cuando tienes menos energía.
  • Reparte las tareas: si sois varios viviendo en la misma casa tendréis que planificar todo lo anterior entre todos, ajustándolo al tiempo que tenga cada uno. Igualmente, si tienes hijos, pueden hacer tareas acordes a su edad y así empezar a adquirir ese hábito y esa responsabilidad.

Además de esto, la mejor forma para ahorrar tiempo en las tareas del hogar se basa en mantener en la medida de lo posible el orden, intentando no dejar cosas por el medio, dejando cada cosa en su sitio e intentando manchar lo justo.

Porque, como se suele decir en mi pueblo, no es más limpio el que más limpia si no el que menos unta.

UnavidaconMai