Tampon Confort 365

No sé vosotras, pero a mi en los días previos a que me baje la regla me pongo SUPER cachonda. Es así. Si queréis lo digo más fino, pero la historia es que me pongo a cien. No hace falta mucha historia: el olor de mi chico, su aliento en mi nuca… Y digo yo, ¿por qué mundo cruel? ¿Tiene que ser justo cuando la puñetera marea roja me va a joder la barra libre? Pues sí. Parece como si la naturaleza quisiera jodernos revolucionando nuestras hormonas justo en esos días. Pero yo digo una cosa… ¿Por qué renunciar?

Hace un par de años conocí a Patricia en una sesión de tuppersex en el curro y me descubrió los tampones Confort 365. Me parecieron la nueva revolución sexual después de los anticonceptivos y la pildora del día después. En Europa llevan utilizándose desde hace más de 15 años, así que están más que rodados, pero como una sólo sabe si la cosa funciona cuando lo prueba en su propio cuerpo.

Lo primero que llama la atención es que no lleva cordón.

cache_32412478Puede dar cosita eso de ponerse un tampón que no tiene de dónde tirar. Supongo que la mayoría os estaréis preguntando: «¿Y si se me queda dentro?» Quedaos tranquilas. Lleva un orificio que queda hacia abajo. Sólo tienes que introducir tu dedo en él, tirar y sale sólo. Incluso si la has liado y te has dejado esa parte en el sentido contrario, basta con que pegues un pellizquito a la esponja para cazarlo.

Ponértelo es sencillo.  Lávate las manos para que el proceso sea lo más higiénico posible. Después, yo recomiendo que, en lugar de apretarlo como se ve en la foto, hagáis una especie de rollito al doblarlo por la mitad (a lo largo, no a lo ancho), dejando la parte de la muesca hacia abajo. Sólo tenéis que empujad hacia dentro poco a poco. No os costará, porque es blandito y viene lubricado con ácido lactico, para que resbale mejor.

El conducto que comunica la vagina con el cuello del útero es demasiado estrecho (como la cabeza de un alfiler) para que el tampón pueda introducirse en él, asi que no, tampoco puede ser que lo metas demasiado profundo. Lo ideal es que quede al fondo de la vagina, pero la cuestión es que no lo notes. Déjatelo a la altura a la que estés cómoda.

Tiene una forma ergonómica y su material hace que se adapte a tus paredes, así que tiene que ser perfecto para hacer deporte. Donde esé esto, que se quiten las compresas de flexigel (que también son fantásticas, por cierto). Aquí no hay escapes que valgan y nadie lo ve. Puedes llevarlo puesto hasta ocho horas.

Sé que somos muy de rayarnos con mil y una historias terribles que le pueden pasar a nuestro chichi por atrevernos con algo nuevo. En seguida nos imaginamos como protagonistas de una leyenda urbana de estas que acaban en urgencias ginelógicas con algún MIR con la cabeza entre nuestras piernas mientras nos censura por ser una guarra que se mete lo que no debe. Es normal, no hay ganas de llevarse sorpresas chungas… Yo os digo que también soy un poco paranoica vaginal y aún así, me atreví.

Una de sus garantías es que es hipoalergénico. El material mantiene el equilibrio natural de la mucosa de nuestra vagina, que no es tontería, porque ya sabéis el por saco que da la puñetera flora cuando no le mola un gel o un lubricante nuevo. Te puede dar guerra para aburrir. Con estos tampones, nada de eso.Tampones Confort 365

Estas características hacen que sea perfecto para el sexo cuando estás con la regla. ¿Cuántas veces no pasa que estás planificando una escapada romántica para una fecha super señalada y cuando llega, ¡zas!, ¡la puta regla!? No vamos a dejar que nos joda más polvazos. Cuando el tampón se encuentra a temperatura corporal, es igual de suave y flexible que la pared vaginal. Tu pareja puede tener la sensación de que toca la abertura del útero, pero nada más.  Eso sí, tienes que tener en cuenta que, después de hacerlo, seguramente el tampón haya avanzado un poco más hacia dentro. Justo después, la vagina se encuentra completamente dilatada, por lo tanto, es mejor esperar un rato y extraerlo cuando la vagina vuelva a su estado natural. Lo más importante estar relajada, adoptando una postura que te resulte cómoda (sentada, de pie o de cuclillas) y seguir las instrucciones. No hay más. Y os juro que yo no me llevo un duro por la recomendación, es que me parece una chulada.

CÓMPRALO AQUÍ