Nota: si tienes un acné muy doloroso o abundante, o simplemente es algo que te preocupa, vete a un dermatólogo. Recuerda que los consejos que vas a leer (o los que puedes ver de la mano de cualquier youtuber o influencer) están basados en su experiencia personal. Es mejor que te asesore un profesional. Y NUNCA TOMES ANTIBIÓTICOS SIN RECETA MÉDICA SÓLO PORQUE LO ACONSEJE UNA INSTAGRAMER Fin del comunicado.

Siempre he tenido acné. Cuando cumplí los 14 años y me bajó la regla, empecé a tener unos granitos que si bien no eran muy grandes o dolorosos, sí eran abundantes. He tenido rachas en las que abundaban los puntos negros, otras con granos que parecen volcanes a punto de explotar, y otras con pequeños puntitos blancos que me desesperaban. Poco a poco he aprendido a manejar mi tipo de piel con ayuda de profesionales (bendita sea la dermatóloga que me atendió hace dos años).

A día de hoy mi cara está mucho mejor, y eso es en parte gracias a los productos que he ido incorporando a mi rutina diaria. Hoy os traigo mis 5 indispensables:

Jabón en barra con sal marina de Pinpoxe (15,99€)

Lo compré por las buenas valoraciones en Amazon y desde entonces soy una fan incondicional. Ya había probado otros jabones faciales en barra, pero ninguno como este.

Es muy suave con la piel, no irrita en absoluto los ojos. Tampoco notas la piel reseca o tirante al usarlo, algo que para mí es indispensable. Y lo mejor de todo es que cuando empecé a usarlo mis granos se redujeron una barbaridad. Por si fuera poco, cunde un montón.

Gel de aloe vera con aceite de árbol de té de Aloe Pura Laboratories (7,93€)

De vez en cuando me gusta utilizar un gel de aloe vera cuando noto la piel algo irritada o dolorida. Por ejemplo, después de usar un exfoliante físico o con partículas (aunque cada vez utilizo menos ese tipo de productos).

Es calmante, no deja la piel pegajosa, y además hidrata. Al tener aceite de árbol de té tiene efecto bactericida así que es un 2×1 ideal para cualquier piel sensible y acneica.

Exfoliante químico AHA 30% y BHA 2% de The Ordinary (7,20€)

Como decía, cada vez utilizo menos exfoliantes físicos. Para las que no sepáis mucho de este tema, los exfoliantes físicos son aquellos que tienen particulas y cuya función es “limpiar” los poros. Los dejé porque al final me irritaban y me di cuenta de que a la larga mi piel estaba mejor utilizando exfoliantes químicos.

Mi favorito es este de The Ordinary. Lo uso como muchísimo 2 veces a la semana, y lo dejo 10 minutos de reloj en mi cara. Os recomiendo hacer una prueba de tolerancia porque puede ser un poco agresivo para algunas pieles. Eso sí, no he probado nada igual. Es increíble lo bien que deja la piel a lo largo del tiempo.

The Ordinary - AHA 30% + BHA 2% Peeling Solution

Sérum 1% Bakuchiol de Revolution Skincare (10,99€)

Este producto no está diseñado para el acné ni para la grasa, pero me lo regaló mi madre en mi cumpleaños y desde entonces me he vuelto una fan incondicional. Supuestamente es para las líneas de expresión, pero a mí me gusta porque deja un acabado increíble en el rostro.

La piel está unificada, suave y con una apariencia luminosa, pero sin nada de grasa. No tapona los poros ni saca brillos o acné, así que para hidratar y conseguir un tono más regular a mí me flipa.

Revolution Skincare - Sérum corrector de líneas finas - 1% Bakuchiol

Fluido hidratante para pieles grasas de Mercadona (2,80€)

Y finalmente la joya de la corona. Lo probé hace dos años de vacaciones. Se me olvidó mi crema hidratante y decidí comprar algo que me hiciese un apaño durante esos cinco días. Pensaba que iba a ser una mierda hablando mal y pronto, pero llevo todo este tiempo usándolo y repitiendo constantemente.

Es la combinación perfecta entre hidratación y control de la grasa. Se trata de un gel que se absorbe en segundos, que no deja la piel tirante, y que de verdad hidrata sin que te des cuenta. Un 10.

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Contadme en comentarios vuestros indispensables.