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Como ser humano que los lunes no abría redes sociales hasta que no había visto el capítulo de Juego de Tronos, te digo: TRANQUILA, NO HAY SPOILER. O al menos nada que sea súper trascendental.
Ahora podemos c0ntinuar hablando.
Era yo muy contraria a ver remakes de series como Física o Química o Los Hombres de Paco, pero cuando oí F.R.I.E.N.D.S- The Reunion, la nostalgia se apoderó de mí. ¿Por qué? Porque era lo más parecido a la realidad que he vivido jamás.
Coincidiendo con el final de Friends me marché a estudiar fuera. Tuve amigos, compañeros de piso y vecinos que entraban por la puerta de mi casa como si fuera suya. Vivimos esas aventuras que solo suceden cuando te independizas en la primera etapa de la adultez.
Lo que no encontré fue un casero que me dejara pintar la puerta de lila, ni cascar un marco dorado a la mirilla.
La expectativa la ponían alta. Mi sueño, irme a China y que mi crush se presentara en el aeropuerto a declararme amor eterno, ¿Me sucedió? No. La realidad era lidiar con un compañero nuevo que era más guarro que «la Cocoles, que la echaron de una fábrica de mierda por golosa». Echar a suertes quién le decía que pasara la escobilla, nuestro capítulo semanal.
Y estas son las razones por las que, si aún no lo has hecho, tienes que ver Friends en HBO:
- Escuchar la cabecera.
Reconócelo, aunque no hayas sido una seguidora incondicional, la escuchas y participas en la única parte de la sintonía que entiendes, las palmadas.
- Alimentar tu espíritu cotilla.
Empezando por los bebés, vas a retomar la vida de los protagonistas desde que los dejaste en 2004 y, siendo una serie ligera, no te hace falta sacar una libreta para apuntar los nombres de los personajes, sus casas y linajes para ponerte al día.
- Confirmado, los 50 y… son los nuevos 40.
Aunque si vivieran en Segovia les tocaría vacunarse esta semana, la realidad es que están bastante bien. ¿Pero ellas? Parece que no han pasado 17 años… Y no creo que en todos los casos sea mérito del bisturí, así que seguiré agarrada como un gato a unas cortinas a mi filosofía de los 36 son los nuevos 26.
- Rememorar momentos inolvidables.
Esto es como cuando te juntas con tus compañeros de la uni, que te pones a hacer recopilación de los mejores momentos y sale a relucir la creme de la creme.
- Te das cuenta de que no es necesario escuchar a Carolina Herrera sobre hacerse el casco en la cabeza para ser elegante a los 40.
Siempre temí sentir la llamada de sentarme en la peluquería y pedirle a Piluca que me haga el casco de señora estándar. Y después de aquellas declaraciones de Carolina Herrera más aún. Ver a Rachel, Mónica y Phoebe con sus melenas, me ha devuelto las ganas de seguir viviendo debajo de mi peluca muchos años más.
- Cameos estelares.
Después de ver a Britney Spears en Médico de Familia, nada debería sorprenderme. Pero es que Lady Gaga es mi religión y que toque Smelly Cat con Phoebe… una ensoñación.
Siiii, lo reconozco, este punto morboso de saber que fulanito estaba a por menganita y era correspondido, pero vivieron siempre como asíntotas, es lo que más me ha molado del remolino de noticias que ha traído la reunión.
Y ahora, corre a disfrutarlo <3
@Loryzepam_
