El cine español probablemente sea lo mejor que me ha pasado en la vida. ¿Qué dice la tía esta? Pues lo que oye, señora: que me encanta el cine español, que le podría estar dando razones de por qué me vuelve loca hasta el día de su muerte, así que para no aburrirla ni a usted ni al resto de los lectores vamos a pasar a la idolatría directamente, y aprovechando que estos son los únicos días del año en los que el cine español importa un poquito al común de los mortales os voy a hablar de mis películas españolas favoritas.

Comencemos por lo fácil:

No creo que sea casualidad que mis dos películas españolas favoritas sean, fíjate tú, dos películas españolas con Oscar.

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Almodóvar, cariño, aunque a muchos les revuelva las entrañas pensar que el artista más grande de su generación es un maricón que da voz a putas, a yonkis y a travestidos. Todas y cada una de sus películas son especiales, pero Todo sobre mi madre le salió redonda.

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Si hay una película «española», a la que el adjetivo «española» le quede que ni pintado creo que esa es Belle Époque. Tan española que tiene a Maribel Verdú y a Jorge Sanz, a Penélope Cruz y a Gabino Diego entre el reparto. Tan española que le dirige Fernando Trueba, española porque fue escrita por Rafael Azcona. Pero, sobre todo, española porque su acción se desarrolla un poquitín antes del estallido de la Guerra Civil.

Un buen drama con su toque social:

Seguramente el drama íntimo con aires de crítica social sea lo primero que se nos viene a la cabeza cuando pensamos en cine español al uso. Bueno, no hace llorar todo lo que se ha rodado en España pero es cierto que el drama fue, durante bastante tiempo, uno de los géneros más explotados. Desde Muerte de un ciclista hasta Camino, pasando por La lengua de las mariposas o AzulOscuroCasiNegro, al cine español parece que le ha gustado de siempre las historias pequeñas que significan cosas mucho más grandes. Y no olvidarse (jamás) del cine kinki, con títulos como La estanquera de Vallecas. Sin embargo, y con el permiso de Muerte de un ciclista que es un peliculón, en la categoría de drama social me gustaría destacar una película que pasó bastante desapercibida y que ya prácticamente se ha olvidado, pero que a mí me vuelve loca: También la lluvia, película estrenada en 2010, dirigida por Icíar Bollaín.

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Pero la comedia:

Esta es solamente mi opinión, no quiero hacerla extensiva a la concepción general del cine español, pero el género en el que más ha brillado nuestro cine ha sido la comedia, quizás porque a los españoles nos gusta recurrir al humor para lo bueno y para lo malo, y porque de todo sabemos hacer guasa. Probablemente la película española más reconocida internacionalmente de la era pre-Almodóvar sea Bienvenido Mr. Marshall, la peli de «americanooos, os recibimos con alegría». La comedia en el cine español es un género amplísimo que abarca infinitas formas de hacer reír, porque en el cine español nos hemos reído con un verdugo (El verdugo), con una comunidad de vecinos enloquecida por una maleta con dinero (La comunidad), con tres primos que se vuelven al pueblo para que a uno se le pase un disgusto (Primos), con un atraco (Atraco a las 3), con otro atraco (El mundo es nuestro), con señoras menopáusicas muy locas (Mujeres al borde de un ataque de nervios) y con una asesina en serie (Sexykiller). Y hasta nos hemos reído sin saber muy bien de lo que nos estábamos riendo, aunque estuviéramos partiéndonos de la risa, como suele pasar cuando ves Amanece que no es poco, mi comedia favorita.

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Cine de autor:

En España no podemos hacer películas de superhéroes no porque no tengamos superhéroes patrios, si no porque en nuestro país no existe una industria del cine. En España suelen importar más los nombres de los directores de las películas que los títulos de las mismas. No buscamos a Iron Man en los carteles, sino a autores como Achero Mañas (Noviembre), Julio Médem (Los amantes del círculo polar), Nacho Vigalondo (Extraterrestre), Eloy de la Iglesia (Colegas), Carlos Saura (Bodas de Sangre), Alberto Rodríguez (La isla mínima), Víctor Erice (El espíritu de la colmena) o Luis Buñuel (El ángel exterminador). Aunque él no sea mi autor favorito, sin duda alguna la película que he elegido dentro de esta cateogría es mi favorita de este autor: Tesis, de Alejandro Amenábar, ópera prima, además, insuperable.

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Otro cine español:

Porque cualquiera que os diga que el cine español es siempre sota, caballo y rey se equivoca soberanamente. Un país que produce más de cien películas al año podrá no tener industria, pero, sin lugar a dudas, tendrá variedad. El documental es un género muy cuidado en nuestro cine y con títulos muy interesantes. Mi favorito, sin lugar a dudas, es el desgarrador relato de Lola Herrera en Función de noche. El terror es otro de los géneros cinematográficos a los que España suele aportar granitos de arena de calidad. La primera película de la saga [Rec]º es uno de los mejores ejemplos, pero no olvidemos que el terror en España vivió su auge en la década de los 70 con películas como La noche de Walpurgis. Mi favorita: Musarañas, de Juanfer Andrés y Esteban Roel.

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