El tamaño está sobrevalorado y, en buena parte, es culpa del porno. Lo mismo que el porno realza los cuerpos esculturales (de bisturí y plástico) y normaliza la humillación de la mujer, también suponen una fuente de complejo para más de la mitad de la población masculina que no posee semejantes instrumentales entre las piernas. 

Mi primer novio compartía medias con Nacho Vidal y tuve que gastarme el sueldo que no ganaba en vaselinas y clases de yoga para conseguir perder la virginidad con él. Lo dejamos y, con los años, me confesó que no había conseguido mantener relaciones sexuales con más chicas porque todas huían intimidadas. En cambio, yo sí amplié miras y descubrí todo un catálogo de penes, que nada tenían que enviar a los 25 centímetros de mi ex. 

Pequeños grandes polvos

Más pequeñas, finas, gruesas, con capuchón, sin…, todo un mundo de lo más peculiar. ¿Y sabéis qué? He de confesar que buena parte de los mejores polvos que he echado han sido con tíos de penes pequeños.  Normalmente, son geniales con la boca y ni os cuento con los dedos, además de ser unos creativos con las posturas. De esta manera, hoy vengo a reivindicar a los penes pequeños. 

 

Sexo oral 

A la hora de practicar sexo oral, puedes introducirte en la boca todo el aparato de tu pareja sexual sin problema (porque sin arcadas, también hay mamadas). Incluso, se abre una puerta a la posibilidad de jugar con los testículos, ya que hay espacio para todo. 

Además, son ideales para poner en práctica la famosa postura del 69 o el face sitting si no queremos ahogarnos ni que nos duela la mandíbula por días. Con un pene pequeño puedes disfrutar de ambas posturas sin necesidad de tomar ibuprofeno para bajar la inflamación después. Será corto, pero manejable. 

Sexo anal

Si no lo has probado, con un pene pequeño puedes encontrar la oportunidad perfecta para lanzarte a la piscina. Al requerir menos dilatación, conlleva menos “entrenamiento” y es una ocasión fantástica para iniciarse en la práctica del sexo anal; pero recuerda que el tamaño tampoco importa a la hora de mantener las medidas mínimas de higiene y lubricación. 

Sácale orgasmos al Kamasutra

Hablemos de biología pura y dura: la mayor parte de nuestras terminaciones nerviosas están en la entrada de la vagina y los penes pequeños llegan a estimularlas. No necesitamos una anaconda para sentir placer. 

Es más, a veces, según que penes (como el de Nacho Vidal y el de mi ex) llegan al “tope” físico de nuestra vagina y, al menos en mi caso personal, termino sangrando por las embestidas. En cambio, eso no ocurre con un pene pequeño y los orgasmos son los mismos. 

Con el Kamasutra en la mano, hay posturas que no pueden realizarse, pero otras muchas que sí; es dar en el clavo. Te sugiero el perrito, en todas sus variantes -profundo, el buen perrito-, el mortero, la bicicleta o el cara a cara, entre otras. 

Nada que un juguete no arregle

Igualmente, si a ti te resulta poca cosa y necesitas algo más largo o grueso, recuerda que existen las fundas de penes o todo un universo de juguetes sexuales, que harán que no quieras descartar a tu pareja sexual por el tamaño de su miembro. ¡Arriba los penes pequeños! 

 

Anónimo