Caminata por la sierra. Bueno, bonito y barato

Últimamente me he propuesto cuidarme más, no con el objetivo de adelgazar, sino para encontrarme mejor anímica y físicamente. No me molestan los kilos que me sobran, lo que me aterra es hacerme mayor prematuramente y no estar en buena forma y en una óptima condición física que limite mi calidad de vida. 

Por ello me he propuesto al menos salir a andar todos los días una hora y algunos días de la semana voy a pilates. ¿Y el finde? Pues ir a la sierra y atreverme con un buen recorrido de senderismo. Nada espectacular de momento, unos 6 kilómetros por una ruta de nivel fácil (principiante) que se ha traducido en una hora y cuarenta y cinco minutos caminando más o menos. Y quien dice sierra dice campo, monte o lo que tengáis cerca. 

En general el senderismo es un deporte bastante completo, bueno para la salud cardiovascular que libera tensiones. Insisto en lo de la naturaleza porque diversos estudios (aunque ya nos lo podemos imaginar si vivimos en una gran ciudad) detallan que es muy beneficioso para los pulmones ya que se trata de zonas no contaminadas. Además, dicen que ayuda a combatir dolencias, depresiones y otros trastornos como el insomnio. 

Todo estupendo hasta aquí, pero ¿qué necesitamos de equipamiento? El primer día me fui con unas deportivas normales que terminaron hechas un asco porque un par de días antes había llovido y había algo de barro. Para más drama en algunos tramos había un poco de pendiente y muchas piedras en el camino por lo que temía caerme y notaba cada maldita piedra que pisaba a través de la suela. Llegué a la conclusión de que no me iba a volver a ocurrir y como no me quería gastar un dineral en unas Chiruca (que están geniales y son la leche, pero para empezar pues se me iba un poco de presupuesto y este es un plan bueno, bonito y barato) me terminé yendo al Decatlón. 

Entré y fui directamente al pasillo destinado a montaña y trekking. La verdad que ningún pantalón me terminó de cuadrar, para qué os voy a mentir. Los tejidos no me terminaban de convencer y pensé que seguramente me terminarían haciendo alguna rozadura así que no los compré. Me preocupaba más el calzado. Y sin quererlo encontré una joya por 35 € (“Botas Nieve y Apreski Impermeables Mujer Quechua SH100 Warm Negro Caña Media”). 

Con suela de caucho, impermeables y calentitas (llevan pelito por dentro) son bastante cómodas y no me hicieron rozaduras y eso que soy de pies delicados, casi todo me hace rozadura el primer día. Aunque si os animáis os recomendaría llevar un calcetín alto que sobrepase el borde de la bota para más seguridad. 

Total, que el fin de semana pasado equipada con unas mallas básicas negras, mis nuevas “botas” y un polar me aventuré a realizar una ruta. 

En definitiva, os animo a que lo probéis. Da igual dónde viváis, seguro que cerca hay algún sitio al que se pueda salir a pasear y respirar. Si además sufrís estrés por el trabajo, como es mi caso, cambiar la rutina y hacer algo diferente seguro que os viene genial. 

 

Amanda C.