¿Alguna vez has sentido que te habían echado cayena en polvo en el chichi después de darle al metesaca con un tío? Yo sí y os juro que es la sensación más desagradable del mundo, tanto física como mentalmente.
Por un lado, te pasas casi una semana echándote pomadas, lavándote con un gel íntimo especial o con agua solamente, y comiendo alimentos probióticos a muerte. Por si esto fuera poco, la comida de coco es bestial. Empiezas a pensar que te has pillado una ETS, que tienes el chichi mal hecho o que el picor no se va a ir jamás de los jamases.
Keep calm, amigas. Hay muchas más razones que una ETS para que tengas irritación en la zona íntima y yo os voy a decir cuáles son.
1. La fricción del polvazo
Esto suele pasar sobre todo cuando llevas mucho sin follisquear. Coges al maromo con tantas ganas que te sientes como cuando queda poca mayonesa y le das unos buenos meneos para que salga todo.
El sexo a lo bruto mola, pero es normal que tanta fricción acabe irritándote a tope.
2. La depilación, esa cabrona traicionera
Si eres de las que se depila TODO justo antes de quedar con un tío, hay varias cosas que debes saber. En primer lugar, el pelo cuando crece pica, esto es un hecho. En segundo lugar, al eliminar el pelo también estamos eliminando una barrera protectora y pueden salir hongos independientemente de lo mucho o poco que has follado. Chiquis, dejaos un poquito de vello, que donde hay pelo hay alegría.
3. Te ha hecho una heridita si te ha masturbado y tenía uñas largas
¿El chiquillo con el que te has acostado tenía las uñas como Rosalía? Si te ha masturbado con las uñas o bien muy largas o bien recién cortadas (cosa más que probable si habíais quedado para follisquear), es posible que te haya hecho un pequeño arañazo interno y estés notando molestias al hacer pis o durante el día.
4. Te estás rayando mucho y lubricas menos
A lo largo del día las mujeres lubricamos de manera natural. Algunas más y otras menos. Esto también varía a lo largo del ciclo menstrual. Sea como sea, si estamos relajadas, lo normal es que haya un mínimo de flujo y lubricación interna.
Cuando nos agobiamos nuestro cuerpo reacciona inhibiendo la lubricación, lo que puede provocar sensación de sequedad y picores.
5. Tienes una candidiasis
En el peor de los casos tienes una candidiasis. Puede surgir o bien porque te la ha pegado tu chico o bien porque estás estresada, has cambiado tu gel de ducha, te has depilado recientemente, te has puesto un lubricante que te ha irritado, etc.
Aunque hay razones totalmente inofensivas por las que te pica el chichi y lo más normal es que las molestias se vayan igual que vienen, VETE AL MÉDICO. Es mejor que te quedes tranquila y que si tienes un problema médico, lo trates de raíz. No sigas consejos raros de internet ni trucos caseros del siglo pasado. La medicina avanza por algo, amigas, así que dejaos asesorar.
