Y entonces… apareciste tú. Tú, que desde el primer momento dices que te gusto por dentro y por fuera. Yo, anonadada. Incrédula. Desconfiada.
No quiero parecer engreída, pero no es difícil que te guste por dentro. No sé, soy divertida, simpática, graciosa. Lo tengo muy clarito, grabado a fuego. Porque es lo que me han recalcado los chicos siempre: ¡¡Soy la eterna amiga perfecta!! En ocasiones, folla-amiga. ¡Oh! ¡¡Qué bien!! (nótese la ironía, por favor). Soy una tía de puta madre con la que compartir momentos divertidos, únicos y bonitos. Pero como amiga, no como mujer, o pareja; desde luego nunca desde el amor idílico.
Pero llega el 2017, llega Año Nuevo, llegan las uvas, llegas tú y… ¡¡¡BOOOM!!! Saltan chispas, por todos lados, en la cama, viendo una peli, saliendo a tomar algo, viajando… Todo es explosivo. Todo arde. Todo explota.  Y yo… ¡también! Porque es por dentro… ¡¡¡¡¡Y POR FUERA!!!!!! Sí, sí, habéis oído bien… ¡¡¡por fuera!!!
Dices que te encanta mi cuerpo (¿eh? ¿que te encanta? Eso es más que gustar. Hasta ahora lo que sabía de mi cuerpo era que había donde agarrar pero que “algunos kilitos sobraban”). Dices que estoy buenísima y que mis curvas me hacen más guapa aún (¿eh? ¿curvas, buenísima y guapa en la misma frase? Chico, ¿te encuentras bien?) Y no solo lo dices, sino que lo demuestras… Besos, abrazos, caricias, cara de quinceañero al verme desnuda…
Y yo, anonadada. Incrédula, aunque ya un poco más confiada. Porque tú a mí me encantas, me vuelves loca, me gustas muchísimo, por dentro y por fuera. Y yo a ti, ¡¡¡también!!! ¡¡¡Por dentro y por fuera!!! Por dentro… y por fuera…
Y entonces descubrimos que hay un mundo para nosotros, que hemos encontrado el AMOR (así con mayúsculas). Porque hay conexión, comprensión, cariño, apoyo, pasión, diversión… Porque es todo “DIFACIL”.
¡Joder! ¡Qué suerte! ¡Eres único! ¡Somos únicos!
Me siento guapa, sexy, poderosa.
A la mierda los prejuicios. A la mierda la mierda. Bienvenido TÚ.

Cinta Gómez

 

En la foto destacada: Callie y Dan