Hace escasamente una hora el amor de mi vida se ha ido por la puerta. Y si amigas, hablo del AMOR DE MI VIDA CON MAYÚSCULAS, NEGRITA Y SUBRAYADO.

Sé que él es el amor que todas hemos soñado de niñas, incluyendo que yo misma he soñado con él desde que lo conocí.  Fuimos una confesión a altas horas de la madrugada que se convirtió en el amor más puro y verdadero que he podido vivir. Él es mi punto G, mi motor en  todo lo que hago. Me ha enseñado a quererme a mí misma, a valorar todo lo que hago y  me ha demostrado que mi corazón enamorado podía volverse a enamorar.

Nuestro amor ha sido un volcán de sensaciones, una montaña rusa que subía continuamente, sorpresas en los rincones, abrazos prohibidos, encuentros llenos de fuego que nos consumían hasta las cenizas y miles, millones, trillones de besos.

Siempre supimos que lo nuestro tenía una fecha de caducidad porque la situación que nos rodeaba en todo momento era complicada y peligrosa, pero supimos querernos a ratos, a días y a bocados. Éramos pasión, de esa pasión que te desborda los ojos y te hace llorar, pero llorar de alegría, de la alegría que él me transmitía, de toda la felicidad que me ha dado.tumblr_inline_mggllvTcrm1rbglnq

Nos amamos contra viento y marea, florecimos en primavera, nos morimos de calor en verano cuando el filo de su boca rozaba mi cuerpo, se nos cayeron los miedos con las hojas en otoño y en invierno sus manos abrigaban todos mis miedos.

Pero claro, el invierno es tan traicionero, que cuando empezaron los primeros fríos, la escarcha de los coches no era lo único que se había congelado, su corazón, ese corazón que durante tantos días y tanto tiempo fue mi único refugio estaba totalmente petrificado de frío. Yo, que tantas veces había abrigado ese corazón con mis besos, lo había llenado de cariño, de mordiscos a quemarropa…yo señoras y señores…no me había dado cuenta de que él ya no me quería igual.

Y no era por nada que yo hubiese hecho, sino porque de tanto quererme, se había dejado de querer él….y se había roto. No sé cuántas lágrimas sumamos entre los dos, lo único que sé con certeza es que he podido construir un dique lleno de sus últimos besos para protegerme de la marea que se me viene encima porque él ya no me quiere igual, mis besos ya no lo curan como antes y es que nos hemos roto de amor. Es verdad eso que decía una grande de “se nos rompió el amor, de tanto usarlo” querida Rocío, qué sabia y que grande has sido siempre.

Pues sí amigas y amigos, ahora os hablo desde un corazón diferente, bueno, o lo que queda de él, diría que me he subido encima de uno de los muchos pedacitos en los que está roto y os escribo esto sin que me deje de moquear la nariz.

de2abd9f42731d024d5c06cd36fa6c6f

El amor es algo tan bonito y tan grande, que nos hace olvidarnos a veces de lo que queremos y mi punto G ha salido a buscarse a él mismo, a encontrar lo que ha perdido por querernos tanto a escondidas,  y es que por haber aguantado tanto a la sombra se ha marchitado su amor por mí.

Y no es una cuestión de poco amor, porque me consta que amor tenemos para ratos los dos, pero es un amor más propio, mucho más importante que el nuestro, os estoy hablando del amor a uno mismo. Él que ha sido mi bastón, mis ojos, mi HOGAR durante más de 700 días ha hecho la maleta y se ha marchado, dejándome sumida en el más absoluto silencio. Y grité, me enfadé, rabié  y conspiré contra el mundo, pero mi mundo ya no era el mismo.

Mi mundo no es el mismo porque él me ha dejado por él mismo, y no lo juzgo, lejos de juzgarlo lo entiendo perfectamente, porque me ha dado todo el amor, el cariño y el apoyo que tenía, aún sabiendo que estaba mal, siendo consciente de que nuestra relación le quitaba vida…

Y qué os voy a contar, estoy rota, deshecha, terriblemente herida y dolorida por partes iguales, pero no voy a negar que lo sigo amando como si me faltase el aire y que lo voy a esperar como el sol espera a la luna todas las noches.

Lo voy a esperar porque nuestro amor no es de los que se acaban, es un amor de los que duran y duran y pueden contra cualquier enemigo, porque es amor de verdad, y la verdad siempre gana cualquier batalla.

Con mucho cariño, para desahogarme un poco.

Pilar.