Hola chicas, hoy vengo a contaros la mayor locura que me ha pasado en la vida.

El título lo resume todo bastante bien, pero prefiero contaros en profundidad para que entendáis lo que tuve que vivir en 2019.

Enero 2019, mi novio me mete los tochacos y me deja compuesta y con una casa que no puedo pagar sola, así que no tardo ni un mes en ponerme las pilas y en buscar a una compi de piso. Me centro en chicas porque paso de meter rabos en mi hogar por tiempo indefinido.

Tras muchas entrevistas conozco a Amandine, una chica belga que trabaja como recepcionista en un despacho de abogados y que se la ve centradita, ordenada y muy maja. No tardamos en comprobar que las dos nos entendemos bastante bien en casa y que nuestras prioridades en cuanto a limpieza y orden son las mismas, así que todo va viento en popa.

Abril 2019, Amandine lleva dos meses en casa y empiezan las cosas raras.

Trae algún que otro chico, nada importante ni molesto, pero flipo bastante al ver cómo son físicamente: mayores (más de 50), trajeados y con cara de amargados. Nunca le pregunto nada a ella porque es su vida y no quiero entrometerme, pero no dejo de pensar en lo poco que le pega ese tipo de tío jajaja Ella muy rubia, muy angelical y con aspecto de guiri perdida en la ciudad.

Junio 2019: se masca la tragedia.

Le comunico a Amandine que me voy de vacaciones con un grupo de amigas y que tiene el piso para ella durante dos semanas. Estoy como loca por pirarme y sé que me puedo ir tranquila porque lo va a cuidar como yo, así que pillo mis maletas y me piro con mis amigas a Girona. Hemos alquilado un apartamento en un pueblecito y nuestro plan es «Cangreburger»: ir a la playa, tostarnos como cangrejos y comer hamburguesas o lo que pillemos, así bien cerdete para sentir que son vacaciones Santillana.

No llevamos ni dos días cuando una de mis amigas tiene un accidente cruzando la calle de camino a la playa y nos tenemos que volver todas a casa porque se queda ingresada. No, no nos quedamos en el apartamento porque queríamos estar con ella y acompañar a su familia, y no nos parecía bonito estar pillando el moreno de nuestras vidas mientras mi amiga estaba con dos piernas escayoladas y la nariz rota jajaja

Vuelvo a eso de las 22h y no  me da tiempo de avisar a Amandine. Entro en casa y me pongo a lo mío, no sé si está ya durmiendo porque se va a dormir megapronto y no escucho ruido, así que no digo nada. Estoy MUERTA y me dispongo a meterme en la cama cuando…

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡CHÚPAME EL PIE HIJO DE LA GRAN PUTA!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Me quedo inmóvil en la cama. No sé si es la vecina, o quién cojones, pero ha sonado muy cerca de mí y me ha parecido Amandine, pero Amandine no puede ser porque es una recepcionista amorosa, ordenada y maja, con cara de guiri que llama semanalmente a sus padres belgas por Skype y les cuenta lo bonitas que tenemos las plantas.

-¿¿¿¿¿¿QUIERES QUE TE LO META POR EL CULO???????? GRITA MI PUTO NOMBRE CERDO DE MIERDA

-AMA, AMA, AMA, PÉGAME, HAZME LO QUE QUIERAS EN EL CULO, ES TUYO Y ME HE PORTADO MAL

Hostiaputadedios.

Me quiero morir, no entiendo nada y lo único que me sale es salir al pasillo para ver de dónde salen los gritos. Me quedo tranquila al comprobar que la habitación de Amandine está sin movimiento, pero vuelvo a dar un brinco al escuchar otro HIJODEPUTA.

Pillo lo primero que puedo, que resulta ser un tubo donde guardo láminas de posters, y sigo caminando. El ruido viene del garaje y me acojono del todo. Abro la puerta y lo que allí me encuentro me deja loca de por vida.

Amandine está metiéndole algo por el culo a un señor de unos 65 años desnudo atado con cuerdas.

Me quedo petrificada, no puedo articular palabra pero tampoco puedo hacer nada más. Amandine se pone a gritar, el señor se pone a gritar y empieza a oler una peste a mierda que casi vomito. Se caga encima del susto, de lo que le metía por el culo y de la emoción, un mix de sensaciones que debía tener ese hombre en todo el cuerpo que acabó en forma de mierda en el suelo de mi garaje.

Consigo moverme, corro a mi habitación, me encierro y al cabo de una hora Amandine llama a mi puerta para explicarme la movida.

Ella, mi compañera belga ordenada y maja, en realidad se saca un pastizal haciendo movidas de dominatrix con señores que conoce en su trabajo y había aprovechado que yo no estaba para adecentar el garaje, que ninguna usamos porque ni tenemos coche ni carné, y montarse ahí la sala del señor Christian Grey.

Evidentemente, Amandine dejó de ser mi compi de plantas, de casa y de todo. Por muy liberal que yo sea no estaba dispuesta a compartir hogar con alguien que se saca un sobresueldo así.. no por ella, sino por lo que traía a casa jajajajajaja Pero seguimos hablando y por lo que veo en sus fotos de Instagram le va estupendamente bien y tiene un pisado en Paseo de Gracia que ya me gustaría a mí.

¿Me tendría que haber quedado con Amandin y cobrarle un poco más de alquiler por sus actividades en el garaje?

K.

 

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