Hace unas semanas, las redes sociales (sobre todo Twitter) se empezaron a llenar de contenido maravilloso sobre un vestido que, a mi parecer, ha conseguido enamorarnos a todas: El vestido de fresas de la diseñadora Lirika Matoshi. Y es que esta preciosidad rompe un poco con todo lo que se nos dice, ya que sí, es un vestido ese cóctel de estos de morirse, pero no, no está hecho solo para un tipo de persona (ya sabéis, delgadas): La diseñadora, gran defensora de la diversidad, defiende la creación de moda para todas las tallas, vistiendo a modelos como nuestra maravillosas Tess y Bree (os quiero, sois mi vida).

Fuente: @breekish (Instagram)

Tanto furor ha causado el vestido que, como no podía ser de otra forma, las polémicas no han parado de llover. Y ahí, entramos un poco en lo mismo de siempre: la moda, amigas, fue creada por y para las delgadas.

Hace siete meses, Tess Holiday llevó este vestido a una gala de premios (DE VERDAD, REINA MORA, DIVINA ELLA). Las que la seguíamos muy pronto empezamos a buscar como locas qué marca era la artífice de semejante preciosidad, porque parecía sacada de un cuento, y estábamos todas muy living, pero no todo el mundo estaba igual. Acabó siendo presa de la lista de “peores vestidas” de la gala, y poco más se habló. Hasta que, hace unos días, subió esta foto:

«Me encanta cómo llevar este vestido me dejó en las listas de «peores vestidas» en los Grammys, pero ahora, gracias a que un montón de mujeres delgadas lo llevan en TikTok, a todo el mundo le encanta. En resumen: la sociedad odia a la gente gorda, sobre todo cuando van ganando»

Fuente: @tessholiday (Instagram)

Vaya por dios, qué casualidad, qué sorpresa.

Otra vez volvemos al problema de siempre. Lo que llevamos criticando aquellos que nos salimos de la norma de alguna forma: al final la moda solo se concibe y se disfruta si el cuerpo que la lleva es delgado y, la persona, normativa.

Ya lo vimos hace unos meses con el siguiente tweet:

«Un tweet riéndose de estas mujeres tiene 100 mil likes, pero seguiro que si Bella Hadid llevara este mismo outfit, estaría en un montón de boards de pinterest llamados «Inpiración de ropa de los 80!. Como siempre, la moda está juzgada exclusivamente por los cuerpos que la llevan»

Fuente: @raynefq (Twitter)

Una y otra vez la misma historia.

Y esto no es por querer darnos importancia. No es por decir “pues yo lo llevé antes”. No. Se trata de que la sociedad margina colectivos y luego, así, sin más, coge “inspiración” de ellos para adaptarlos a lo que sí está bien. En definitiva, la sociedad es como la chica de clase que te hacía bullying por friki y ahora, cinco años más tarde, lleva camisetas de Marvel porque ahora sí que es guay.

Y yo qué queréis que os diga, pero estoy demasiado mayor, gorda y queer para esta mierda.