Estos días están siendo complicados hasta para decidir qué vamos a cocinar o qué  nos apetece comer.

Por ello, os traigo la receta definitiva de salmorejo que os salvará de comeros el coco en más de una ocasión por varios motivos: es rápido de hacer, está para chuparse los dedos y es muy económico.

Esta es la receta de mi madre, cocinera excelente y mujer que jamás  en la vida ha seguido al pie de la letra una receta en cuanto a cantidades, la verdad sea dicha.

Allá va, espero que la disfrutéis tanto como yo y que repitáis más de una vez.

Ingredientes (de 4 o 6 personas):

Pan del día anterior con buena miga. Alrededor de unos 150 gramos.
4 o 5 tomates bien maduros dependiendo del tamaño.
1 diente de ajo.
Un buen chorro de aceite de oliva.
Un chorrito de vinagre.
1 pizca de sal.

Para decorar:
1 o 2 Huevos duros.
Jamón a taquitos

Se pone a remojo (en un bol) el pan de día anterior, es importante que sea un pan con buena miga.

Se baten los tomates maduros sin piel y el ajo. Se añade el aceite, el chorrito de vinagre y la sal.
Cuando todo esté batido, se escurre el pan que teníamos en remojo y se va añadiendo poco a poco en la batidora y se bate todo junto.

Se reparte en cuencos individuales y se le echa por encima un poco de huevo duro y taquitos de jamón. Se mete al frigo y se saca a la hora de comer bien fresquito.

 

Como veis es bastante fácil aún sin seguir una receta con unas medidas puntillosas. Espero que le deis buen uso a la receta de mi señora madre, un éxito siempre en la mesa.

 

¡Bon appetit, Lovers!