¡Opa! La cocina griega es una gran desconocida y es una pena.

Seguro que alguna vez has comido mousakka, tzatziki y ensalada con queso feta, pero la gastronomía de este país va mucho más allá.

Por eso mismo, te traigo una receta muy sencilla y diferente con las que sorprenderás a cualquier comensal.

Se trata del “Jtapódi me makaronáki”. Sé que suena un tanto a insulto, pero ya sabes que este idioma suena rudo, pero luego no es así. La traducción literal sería “pulpo con macarrones” y eso es lo que te invito a preparar.

En Grecia el pulpo es un ingrediente muy utilizado. Este país siempre ha vivido de la pesca y es muy común verlos tendidos en las terrazas de las casas, ya que lo secan para hacer muchas recetas, pero en este caso, no necesitamos pulpo seco.

Este plato es un guiso de pulpo con pasta que está bueno de verdad. Lo probé hace años cuando pude visitar este maravilloso país y desde entonces es un básico para mí.

Para poder hacerla necesitas:

  • Dos patas de pulpo cocidas
  • Una cebolla a trocitos pequeños
  • Cuatro cucharadas de tomate frito
  • pimentón dulce
  • una rama de canela
  • vino blanco
  • pasta con forma pequeña (forma de piñones, gotitas o caracolitas pequeñas )
  • Aceite de oliva y sal.

La preparación es muy sencilla. Corta la cebollita y rehógala en una sartén o cacerola. Cuando esté dorando, echa el pulpo a rodajitas y mezcla. Vierte el tomate, el vino blanco, echa el pimentón y la sal y métele dos meneos. Echa un par vasos de agua y deja hirviendo unos 10 minutos a fuego medio. Cuando todo esté mezclado, tienes que echar la pasta, pero puedes hacerlo de dos modos.

Si vas con prisas, hazlo como una receta de pasta normal. Echa la pasta y deja que se cueza todo hasta que no quede mucho caldo. De este modo, la pasta se cuece con toda la mezcla y queda muy rica.

Ahora bien, si la quieres hacer a tope de calidad, haz el paso final al horno.  Precalienta el horno a 200 grados, pon la mezcla del guiso en una cazuelita de barro y añade la pasta. Realmente es lo mismo, se trata de que la pasta se haga, pero el calor del horno hace que todo se mezcle de una manera más paulatina el resultado será un plato mucho más meloso.

Si al meterlo al horno le quieres poner unas migas de queso feta, ya es el acabose. No lo indico como algo indispensable porque no a todos les gusta este queso, ya que es un sabor intenso, pero le va de maravilla a la mezcla.

¡Ponte con ello! Si quieres sorprende en casa con algo nuevo, sencillo y rico, ¡ponte manos a la obra!