Le conté esta historia a una de mis amigas y la verdad es que alucinó. Nunca se lo conté en el momento porque no le di mucha importancia, pero al contarlo le di mucha más de la que le había dado anteriormente.

La cosa es que ya llevaba un tiempo acostándome con el capullo que me lo dijo y no sé con qué intención me dijo semejante gilipollez. Yo sabía que él se había acostado con chicas que no estaban tan delgadas como yo, pero eso qué más daba, no es algo a lo que le diese mucho rumbo.

Hasta que un día, cuando terminamos de hacer nuestras cosas, acto seguido me dijo “la verdad es que no me suelen gustar las chicas tan delgadas”. Yo no supe cómo reaccionar y ni siquiera sé qué le respondí. Ahora me duele recordarlo porque eso es algo que no se debería decir nunca. Pensé en lo que sentían las chicas a las que les habían dicho “me gustan más delgadas” y me sentí fatal, porque es algo que indudablemente afecta a tu autoestima.

 

Yo tengo un cuerpo que entra en lo “establecido”, por eso pensé en las chicas cercanas a mi que han tenido que aguantar cosas por el estilo no teniendo un cuerpo de maniquí, la presión y las cosas que soportan de algunas personas tiene que ser realmente agotadora. La amiga a la que se lo conté no tiene nada que ver en físico conmigo y me dijo que evidentemente era igual de malo que se lo dijesen tanto a una chica delgada como gorda, eso me hizo sentir comprendida y a la vez me enfadó, porque no es algo que se deba decir, es totalmente innecesario. Da igual las preferencias que tengas, pero si vas a hacer algo con alguien, lo que sea, no se te ocurra decir eso y menos después de hacerlo, como si estuvieses excusándote por haberlo hecho con una chica que no es de tu agrado al cien por cien.

Si no te gustan las chicas como yo, vete a hacer tus cosas con una que encaje mejor contigo, aunque ninguna se merece a alguien con semejantes ideas. Esto bajó un poco mi autoestima, naturalmente. Yo he sido siempre muy delgada, pero me veía bien. Aunque al recibir esas palabras comencé a dudar sobre mi físico. Y siento enormemente que algunas chicas, sean como sean, tengan que aguantar esto también, porque está totalmente fuera de lugar. Así que sentíos bien con vosotras mismas, porque eso lo tiene que sentir una y nadie más. A quien le guste genial y a quien no, hasta luego; no necesitamos a nadie que no se sienta cómodo con algo que nosotras trabajamos día a día.

Además, siempre habrá alguien que en medio del polvo se pare a decirte que estás buenísima, aunque eso ya lo sepamos.

 

Laura Abad