Seguro que alguna vez habéis visto algún estudio tope de científico que os ha dejado culitorcidas, ¿verdad? Que si los hombres con barba son más infieles, que si los dueños de gatos son más propensos a volverse locos, que si en realidad el orgullo no precede a la caída (real que este estudio existe)…

Pues para premiar estos estudios de mierda están los Ig Nobel. No, no es la cuenta de Instagram de los Nobel, son premios auténticos y anuales que se dan a los estudios más disparatados en categorías similares a las del certamen original.

El de medicina para él, por favor

Para celebrar el fin de este 2018, os traigo los estudios más locos que se han publicado este año, siendo merecedores del premio Ig Nobel:

Ig Nobel de la Paz

Este viene directo a España (a pesar de la mala milk que gastamos cuando vamos al volante). En concreto, se lo han llevado unos científicos de la Universidad de Valencia, pertenecientes al INTRAS (Instituto de Investigación en Tránsito y Seguridad Vial). ¿Y qué han hecho? Pues han medido la frecuencia y los efectos de, precisamente, gastar mala milk al volante. Según ellos, un cuarto de los conductores grita y/o insulta mientras conduce, y se debe principalmente a que otros incumplen las normas. También era de esperar, ¿no?

Aquí podéis entrar en la web de la Universitat de València para comprobar que esta locura es real.

Ig Nobel de Educación Médica

Este es maravilloso. Resulta que el doctor japonés Akira Horiuchi hizo un informe de una colonoscopia. Que. Se. Hizo. Él. Mismo. Mira, como médico (de animales, pero soy médico) no sé ni por dónde empezar a preguntar. Bueno, sí: ¿pur qué?

La imagen incluida en el trabajo del doctor japonés Akira Horiuchi, que describe cómo se ha realizado una colonoscopia a sí mismo.
Imagen representativa incluida en el trabajo del médico

Ig Nobel de Nutrición

Este premio va para un investigador británico, James Cole, por calcular que la dieta caníbal tiene menos calorías que otras dietas carnívoras. Todo esto en el Paleolítico, no vayáis a pensar que esto lo han comprobado científicamente con Hannibal Lecter, y cosas así. Por eso, este crack concluye que si los tipos paleolíticos se comían unos a otros no era por las propiedades nutricionales. Me imagino a los homínidos de entonces en el crudo invierno, sin ver un conejo desde hace meses, en plan «¿Qué comemos hoy?» «No sé, cómete a PaleoPepe; total, no pega brote».

Disfrutad aquí del artículo. Oro puro.

Ig Nobel de Literatura

Este Ig Nobel se fue directo para un grupo de expertos en diseño industrial que comprobó algo que ya sabíamos: que la gente no se lee los manuales de instrucciones. Pues claro que no, nos lanzamos a saco y ya cuando nos hemos cargado el aparato en cuestión acudimos al manual como si nos fuese a salvar. Pero no. El caso es que estos investigadores han titulado el estudio «La vida es demasiado corta para leer un manual de instrucciones». Toda la razón, hermanos.

Pero si consideráis que es lo suficientemente larga como para leer su estudio, aquí está.

Ig Nobel de Economía

Con este me llevo descojonando un rato. Resulta que investigadores de varias universidades de Canadá y Estados Unidos han descubierto que resulta efectivo, para los empleados que se sienten menospreciados, apuñalar muñecos de vudú de su jefe. Porque así se disipa la sensación de injusticia. ¡JÁ! Porque así le echan una maldición, está clarísimo. Esto fue Ig Nobel de Economía porque no había Ig Nobel de Magia Negra.

Por favor, disfrutad de esta obra de arte aquí.

Ig Nobel de Antropología

Este premio se lo lleva un grupo de científicos de diferentes países que ha conseguido demostrar que los chimpancés de los zoos imitan a los humanos tanto como los humanos los imitan a ellos. Y con bastante acierto. Y seguro que se ríen de nosotros más que nosotros de ellos. El karma existe.

Ig Nobel de Medicina

Un grupo de científicos estadounidenses se llevó este galardón (iban a por él desde el momento que plantearon el estudio) porque consiguieron demostrar que las montañas rusas aceleran la expulsión de cálculos renales. ¿Tienes una piedra en el riñón? Ale, al último vagón del Big Mountain del DisneyWorld y mañana la tienes fuera. Se decidieron a hacer el estudio porque había gente que aseguraba que tras subirse a esa atracción conseguían expulsar las piedras renales. Y resultó ser verdad. ¿Estudio patrocinado por Disney? Quién sabe.

Y aquí una explicación un poco más extensa. Olé ellos.

Ig Nobel de Biología

Un grupo internacional de científicos demostró que los catadores de vino podían detectar la presencia de una mosca en la copa simplemente por el olor del vino. Obviamente. Cómo se atreve la mosca a joderles el Gran Reserva.

Ig Nobel de Medicina Reproductiva

Ojo al momento McGyver que se marcaron los científicos de la Universidad de Oregón. Esta es la típica universidad de la que salen estudios raros y los investigadores ya iban con la idea de llevarse algún premio este año. ¿Por qué? Porque estos figuras utilizaron una puta ristra de sellos para comprobar si los pacientes con posible diagnóstico de impotencia tenían erecciones mientras dormían. ¿Sensores? No. ¿Un señor observando todo el rato el asunto del paciente? Tampoco. Tú ponle unos sellos y si se rompen por la línea de puntos es que habemus erectio. Mientras no fuesen sellos con la cara de alguna persona…

¡Y hasta aquí llegaron los Ig Nobel de este año! ¿Qué nos deparará el 2019?

 

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