En realidad es difícil resistirse al ofertón que tienen actualmente. 50% en tu suscripción de HBO MAX para TODA LA VIDA si te das de alta antes del 30 de noviembre. Avisado estás.

 

Si visitas Escocia y te decides a hacer un free tour por Edimburgo, en seguida verás que parte del contenido se basa en las idas y venidas de J.K. Rowling mientras escribía “Harry Potter”. Te enseñan en qué cafetería se sentaba a escribir, desde la que podía observar sin problema el patio de un curioso colegio, cuyos alumnos se dividen en cuatro casas, que tienen por tradición competir entre ellos, para ver quién consigue los mejores logros académicos y deportivos. Seguro que te suena. Muy cerca de allí se encuentra también el cementerio de Greyfriars, uno de los más emblemáticos de la ciudad por todas las leyendas de apariciones que le acompañan. Pues además, casualmente tiene dos lápidas, cuyos nombres son prácticamente iguales a los de dos personajes muy importantes del libro. Y es que absolutamente toda la ficción que consumimos, en mayor o menor medida, está basada en hechos reales. Incluso, lo creas o no, la terrorífica historia de Freddy Krueger. 

Precisamente porque muchas veces la realidad supera la ficción, alguien tuvo a bien inventar los documentales. Basta de creerse lo que otros contaban, mejor ver lo que se cuece por una misma. Y si en algo son expertos en HBO Max, es en el género documental. Los hay de todas las temáticas que te puedas imaginar y para todos los gustos. Como no podía ser de otra manera, yo me quedo con esos que te dejan los ojos como platos, los que te dan ganas de ser bilingüe para tener el ¡Oh my god!, en la boca a cada minuto. Esos que te hacen preguntarte si las personas de la pantalla pertenecen a la misma humanidad que tú, porque por muchos kilómetros de distancia que medien entre su realidad y la tuya, parecen estar todavía más allá, como en otro planeta. Si a ti también te gusta el entretenimiento y la sorpresa a partes iguales, toma nota porque te traigo lo mejorcito de la plataforma. 

  • “Every brillant thing”. Siempre hay algo por lo que merece la pena luchar. Es de esos que te hacen reír y llorar a partes iguales, lo que es todo un logro teniendo en cuenta que narra la historia de un chico que, después de que su madre intente suicidarse, decide elaborar una lista sobre todas las cosas maravillosas que tiene la vida, y por las que merece la pena quedarse a vivirla. Está relatado en forma de monólogo y las ocurrencias de este chico dan muchísimo en qué pensar. 

  • “El estado contra Pablo Ibar”. Ángel o demonio. Es increíble cómo, dependiendo de la pluma que dibuje su perfil, te venden a este chico como un pobre crío que cayó en el sistema penal americano víctima de sus circunstancias, o como un sociópata sanguinario sin remordimientos. Las dos caras del único hombre español, que estuvo casi veinte años en el corredor de la muerte en Estados Unidos. En esta serie documental se entrevistan con él, con su familia y sus abogados, pero también con los que lucharon por su condena y la familia de las víctimas del crimen que, a día de hoy, sigue sin esclarecerse por completo. 

  • “El juramento”. Los gurús del éxito siempre acaban mal. Imagina un auditorio gigante, a rebosar de personas sonrientes que miran hacia un único hombre. Éste se mueve con soltura sobre un pequeño escenario, con un micrófono inalámbrico pegado a su mejilla, mientras gesticula de forma teatral, para dar énfasis a la verborrea sin sentido que vomita por la boca. En su repertorio, un sin fin de tópicos: tú eres tu destino, la verdad está en ti, recorre tu propio camino. Por un buen puñado de dólares y la venta de tu alma inmortal, el buen señor te enseña a alcanzar el éxito que mereces. Este documental se adentra en la organización NXIVM, que presumía de métodos infalibles de superación personal, y acabó siendo, además de una estafa piramidal, una organización de tráfico sexual. Una empresa con cientos de miles de afiliados en Estados Unidos, entre ellos muchas estrellas de Hollywood, que querían ver cumplidos sus sueños y acabaron viviendo una auténtica pesadilla. 

 

  •  “Dolores”. Una condena mediática. No había pruebas contra ella, pero sí rumores, prejuicios y revanchas personales. Así es como Dolores Vázquez terminó con sus huesos en la cárcel acusada del asesinato de su hijastra, Rocío Wanninkhof. Recién estrenada en la plataforma, es la primera vez que la protagonista de esta historia cuenta su verdad en primera persona.  Un documental para reflexionar sobre el daño que puede hacer ese periodismo que, a sabiendas de que la verdad no vende tanto como el salseo, no duda en crear una imagen distorsionada de la realidad. “Tiene cara de culpable”, fue una de las frases más repetidas de aquellos tiempos y no, no lo era. 

  • “Un hijo peligroso”. Cuando la amenaza está dentro de casa. Como te decía, la realidad siempre supera la ficción. Si en su día alucinaste con la película de Macaulay Culkin,  “El buen hijo”, no te puedes perder este documental. Se adentra en las vidas de varias familias cuyos hijos son perversos. No hay terapia, sistema educativo o método de modificación de conducta que los haga cambiar. Especialmente llamativo es el caso de una de las madres, que decide llevar siempre consigo todos los cuchillos de la casa, porque le da miedo dejar al alcance de su hijo cualquier cosa con la que le pueda hacer daño a alguien. Un documental escalofriante, que pone de manifiesto la falta de servicios de las administraciones públicas, frente a la desesperación de estas familias, que no saben qué hacer para ayudar a sus hijos ni a sí mismas. 


Sara Martín