ODIO PLANCHAR. Lo odio. Me explota la cabeza cada vez que escucho a amigas decir que planchar «les relaja»: a mi me relaja tumbarme en la hamaca en la playa, hija, no planchar. En invierno soy una titi feliz porque los jerséis no se planchan y jamás en mi vida he planchado vaqueros, pero en verano SUFRO lo más grande porque todas las blusas, camisas y vestidos que uso necesitan algo de plancha. Me sé todos los trucos para tender la ropa lo menos arrugada posible al sacarla de la lavadora, pero siempre falta un pelín. Me he visto todos los videos de Youtube de «plancha rápida sin esfuerzo» pero son mentira: me esfuerzo mucho. El sufrimiento es real, o mejor dicho, ERA.

No le enfocan la cara porque seguro está llorando

Digo «era» porque hace unos meses me pillé una plancha vertical de vapor y la amo con la fuerza de los mares. ¿Sabes por qué?

Si supiese hacer gifs con purpurina esto brillaría, pero no sé
  • Ahorro tiempo. Las planchas verticales sirven para planchar ropa «colgada» en una percha. No pierdes tiempo sacando y armando la tabla de planchar (HORROR): solo necesitas llenar su pequeño depósito con agua y esperar a que caliente en unos 30 segundos.
  • La guardo en el baño. Olvídate de buscar la plancha (¿dónde se guarda la plancha?): yo la guardo en una esquinita del armario por lo que está lista para usarse cuando sea.
  • Te la puedes llevar de viaje. Este tipo de planchas pesan menos de un kilo, por lo que te las puedes llevar perfectamente en la maleta si te vas de boda. A mí me salvó la vida en una boda que tuve el verano pasado 1) a 500km de mi casa 2) después de estar 10 días de vacaciones de aquí para allá 3) donde llevé un vestido plisado. Dime tú qué vestido plisado sobrevive a todo eso.
  • Adiós arrugas. Si tu plancha es de vapor sabes que ayuda a quitar arrugas mucho más rápido… y en este caso, quitando todos inconvenientes de una plancha tradicional.
  • Puedes planchar ahí donde lo necesites. ¿Te ha pasado que mientras duermes te quedan las sábanas como si hubieses hecho nudos con ellas? Pues a mi sí. Con la plancha vertical puedes planchar las sábanas en un periquete y sin sacarlas de la cama, y con el vapor además esterilizas y matas cualquier posible bacteria (que no tenemos sábanas suficientes para cambiarlas todos los días).

¿Queda igual, igual igual que con una plancha tradicional? Evidentemente no: será muy difícil lograr pliegues perfectos. ¿Hace un arreglo muy apañado? Definitivamente. Como os conté, la guardo en el baño y luego de la ducha matutina la uso para repasar lo que me vaya a poner ese día, por lo que no tardo más de unos minutos en tener la ropa perfecta para el día. ¿La recomiendo? 100%. Para mí ha sido la solución perfecta y fácil para mi odio hacia el planchado, por lo que os la recomiendo ¡muchísimo!

 

 

Puedes comprarla aquí.

 

 

POST NO PATROCINADO.

Enlace afiliado.