¿Estás a puntito de ser mamá? Recibe desde aquí mi más sincera enhorabuena. Quizá ya tengas todo a punto para la llegada de tu retoñito: tendrás ya su habitación casi lista, los armarios repletos de mini ropita que estás deseando ponerle, te has hecho ya a la idea de lo mucho que va a cambiar tu vida… Y ahora llega el momento de dejar a punto esa bolsa con la que te dirigirás al hospital para dar a luz.
¿Qué necesito llevarme en la maleta para dar a luz en el hospital?
Muchas obviamos el detalle de preparar esa maleta hasta que nos vemos casi a las puertas de salir de cuentas. Nos centramos tanto en dejarlo todo bien atado en casa que olvidamos totalmente que antes, deberemos pasar un par de días en el hospital y para eso, chicas, hay que ir preparadas.
Mi consejo inicial será que toméis nota de todo aquello que creéis que os hará falta. Como es habitual pecaréis de exageradas y meteréis muchas más cosas de las que usaréis, pero mejor que sobre a que falte. Son momentos de muchos nervios y es lógico que algo se nos escape, así que por aquí os dejo todo aquello que yo llevé y que necesité.
PARA NOSOTRAS, LAS MAMÁS
Camisón con abertura delantera.
Sí amigas, camisón, nada de pijama. Tengamos en cuenta que una vez demos a luz nuestros bajos serán zona de alto riesgo y es mejor que nos puedan explorar con facilidad a tener que andar poniéndonos y quitándonos pantalones. La abertura delantera es más que nada por la lactancia materna, comodidad para poder asomar el pecho sin tener que hacer florituras con los brazos. Este modelo es uno de los más usados.
Bragas. De algodón altas y cómodas, baratas o incluso desechables.
En su día pensé que las bragas de papel eran una burrada y que no serían necesarias pero una vez das a luz y ves todo lo que expulsa tu cuerpo… Os recomiendo encarecidamente que si preferís usarlas de algodón, no les tengáis demasiado cariño. El postparto lo mola todo. Yo usé estas desechables de la marca Chicco, por si queréis echarle un vistazo.
Compresas postparto o de noche.
En el hospital te darán compresas, por supuesto, y serán de esas tipo pañal que abultan una barbaridad pero que también lo absorben todo. Si no quieres usar de ese tipo llévate un par de paquetes de compresas ultra plus noche, aunque ya te digo yo que tendrás que cambiarte cada poco tiempo.
Sujetadores de lactancia, un par de ellos.
No te los olvides sobre todo si has decidido dar el pecho. Sé de mujeres que se los dejaron en casa y no hay nada más incómodo que recolocarte la teta con un sujetador deportivo. Nuestra Mirella nos habló de los mejores en este artículo, ¿lo has leído ya?
Discos de lactancia.
Súper importante. La subida de leche suele darse poco tiempo después del nacimiento del bebé y hay que estar prevenidas. Las pérdidas de leche son de lo más normal e incómodo y estos discos dan la vida. Haceros con mínimo una caja para empezar. Medela, esa marca tan conocida en el mundo de la lactancia, tiene en venta packs de hasta 60 unidades. Podéis encontrarlos aquí.
Crema para las grietas en los pezones.
Mi recomendación es Purelan de Medela. Los pezones agrietados nos hacen ver las estrellas y nunca sabemos si será algo que nos vaya a pasar o no. Ojalá no lo paséis jamás, porque duele horrores, pero de ser así esta cremita es alivio puro.
Zapatillas cómodas o incluso chancletas.
¿Te toca parir en temporada de calor? Seguramente ya hayas experimentado lo que es estar realmente hinchada. Vas a pasar un par de días en una planta de hospital, lugar nada caracterizado por el fresquito en su interior. Opta por ir cómoda y llévate el calzado con el que te encuentres mejor, lo agradecerás.
Documentación personal y plan de parto.
Has planeado este momento durante casi nueve meses y quieres que todo salga bien. Lleva en una carpeta todo el papeleo que consideres, toda prueba que te hayan hecho durante el embarazo, tu DNI y tarjeta sanitaria. Y no olvides ese plan de parto que habrás redactado con tu matrona. Si todo va bien y en el hospital son respetuosos, tomarán cuenta de tus preferencias para que todo vaya como tú has decidido.
Neceser para el aseo.
Cepillo de dientes, pasta dentífrica, desodorante, peine, coleteros y pinzas, champú, crema hidratante… En los hospitales públicos suelen facilitar geles para la ducha pero poco más. Ante todo cuenta con mantener el pelo recogido y sentirte tú todo lo a gusto que puedas.
Ropa para salir del hospital.
No lo olvides. En mi caso me decanté por unos leggins y una blusa suelta. Nada de vaqueros ni prendas que aprieten. Piensa en algo con lo que te sientas bien pero que no roce y te permita moverte con facilidad. Intenta que sea un conjunto con la que te veas guapa. Vas a dar a luz y vivirás un choque de sentimientos muy heavy, no está de más que te mires en el espejo y te sigas reconociendo todo lo guapa que eres..
PARA TU BEBÉ, EL RECIÉN LLEGADO
Bodies.
Sí, yo fui esa madre que llevó como diez bodies en la maleta, ella, doña abundancia. Con la mitad es más que suficiente pero yo me dejé llevar por ese miedo a las cacas explosivas y los vómitos a propulsión. Hoy hay packs muy económicos y variados, por ejemplo estos. Tened en cuenta que las primeras semanas los bebés crecen rápido y la ropa en seguida se les queda pequeña.
Pijamitas de tallas pequeñas pero variadas.
Probablemente te hayan dicho el peso y talla aproximados de tu bebé. Es muy difícil dar con las cifras exactas así que si cuentas con que tu retoño será muy pequeño, lleva por si acaso pijamitas de dos tallas diferentes. Sé de una que tuvo que enviar corriendo a su chico a casa porque le habían asegurado que su bebé era de bajo peso (no más de 2,500 gr) y al final dio a luz a un gordis de casi 4,000 gr. Mejor no os digo como le quedaban los pijamas al pobre bebé. Aquí añadiría también un par de pares de calcetines para cubrirle los pies si el pijama no lo hiciese ya.
Gorritos, y nada de manoplas.
Los bebés tienden a perder el calor corporal por la cabecita, así que es bueno cubrírsela sobre todo cuando son todavía pequeños. En el hospital le pondrán el habitual que ellos tienen allí y depende de la comunidad, algunos son bonitos y otros son verdaderos horrores. Actualmente ya venden conjuntitos de pijama con gorro a juego que son una monería auténtica. ¿Qué opináis de esta maravilla? Sobre las manoplas, por favor, olvidadlas. Los bebés tiene que sentir el tacto, tocarse, sentir vuestra piel y vuestro calor.
Toallitas.
Se desaconseja el uso de toallitas las primeras semanas de vida, por eso de que los componentes puedan perjudicar la piel sensible del bebé. En el hospital os animarán a limpiarlo con agua y jabón neutro. Si de todas formas prefieres las toallitas, deberás llevarlas tú. En el mercado ya hay marcas que han eliminado cualquier aditivo químico o mínimamente irritante, buscadlas, le haréis un favor al culete de vuestros peques.
Pañales.
Mientras estéis ingresados os los proporcionará el hospital. De todas formas no está de más meter alguno en la bolsa por si cuando os den el alta hay sorpresas inesperadas.
Muselinas.
Son esa tela suave y fina perfecta para accidentes de tipo vómito. Yo recomiendo un par en la bolsa y unas cuantas en casa porque seguro les daréis muchísimo uso desde el primer momento. Podéis encontrar cientos de modelos chulísimos, mirad estos que os propongo.
Mantita.
Seguro que algún miembro especial de la familia, o algún amigo ya os ha regalado esa mantita que queréis que sea la primera del bebé. Llévala y deja que tu bebé se haga a su tacto y a su olor desde el principio. Hay mujeres que duermen con ella antes de dar a luz para que tome su olor y así después tranquilice a sus hijos. No hay nada científicamente escrito pero nunca se sabe.
Ropa para la salida del hospital.
Ese primer conjunto con el que quieres que salga a la calle por primera vez, aunque sea para montarse en el coche e ir directos a casa. Aquí la elección es de cada una, hay quien prefiere algo sencillo y otras optan por modelos más elegantes. Elijas lo que elijas, seguro que ya estás imaginándote ese momento y te estás emocionando.
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