¿Cuántas bodas tenéis este año? Pero sobre todo me interesa saber, ¿de cuántas habéis decidido pasar por el tema money? Y es que como te toquen muchas bodas en un año, lo que te toca es casi hipotecarte si seguimos las pautas y lo que se supone que «hay que» regalar, porque es lo típico o porque es lo que todo el mundo hace.

Entre vestidos, peluquerías y ya como te toque desplazarte, hoteles y billetes, un finde de boda se te pone casi en unas minivacaciones, especialmente contando con el REGALO. Y es que ahí está el movidón. Según una encuesta realizada por Ofertia, el 82% de los invitados a una boda regala dinero. Regalar dinero, qué feo suena, de verdad. Y la media está en unos 150 euros en Madrid y el norte y más de 300 euros en Andalucía. ¿300 euros? ¿En serio?

Toma ya, nos hemos forrao

Bueno, veamos, independientemente del equipo que seas sobre si nºde cuenta en la invitación o no ( yo soy team no)*, cuando te invitan a una boda, regalar es bien. Lo mismo que cuando te invitan a cenar a una casa, llevas un vino, por ejemplo. Pero claro, esto es a lo grande.

Entonces, a ver que estás aquí contándonos un rollo y yo quiero saber cuánto regalarle a mi amiga de la uni Pititi a la cual no veo desde hace dos años y lo justo me sigue dando a like en Instagram cuando subo fotos de mi perro, pero ha decidido invitarme a su boda en Mallorca.

Esta es mi humilde opinión, como treintañera en edad de época bodil constante y como persona que trabaja con novias habitualmente.

Lo primero, pregúntate tú si te apetece ir a esa boda, la invitación no es una obligación. Si no quieres ir a una boda, no tienes por qué ir. Otra cosa son los compromisos laborales y familiares, que siempre son más complicados de excusarse.

La mejor boda ever

Si decides ir, calcula el presupuesto y lo que puedes realmente gastar. Cada uno regala lo que quiere y lo que puede. Si una amiga tuya quiere poner 300 euros, pero eso es la mitad de tu sueldo, pues evidentemente, no lo vas a hacer. No te sientas mal por regalar menos, no regalar o ¡sorpresa! regalar algo que no sea dinero.

Si es una persona cercana, podéis juntaros entre varios y regalar algo físico para su casa, algo que sea un recuerdo especial, algo que tengan siempre ahí. Y lo que os sobre, pues ya se lo dais y así, todos contentos. Los pro dineros y los pro regalos. Incluso si sois de esos pesados que hacen juegos imposibles para que los novios adivinen el número de cuenta. STOP CEMENTOS. STOP PELIS PORNO. STOP MIERDAS.

Todo mi dinero para ese matrimonio perruno


¿Y si no tengo ni pa´pipas?
Pues volvemos a lo de antes, ¿realmente es una boda que no te quieres perder? Si es alguien cercano, pues seguro que quieres estar y SEGURO que los novios quieren que asistas y les dará igual si les regalas algo o no. Habla con ellos y les parecerá lo más normal del mundo. Y si no se lo parece, pues chica, igual no son tan amigos. O tienes amigos muy cutres.

¿Pero le damos lo mismo que a los de la boda anterior? Pues sí. No hay cosa más cutre que decir «a estos les damos menos que el restaurante es peor, que es solo un cocktail». Primero, no sabemos cuanto se están gastando realmente y encima, ojo, que si lo están haciendo así igual a ellos sí les hace más falta que a los que os llevan a comer a un cinco estrellas. Si es que realmente veis el regalar dinero porque «ayudáis» a los novios.

Vosotros no necesitáis nada que sois gatos y encima princess

Recordemos, son REGALOS, no es la entrada, no estás pagando el cubierto. Ellos están invitando, por eso el primer consejo que he dado siempre ante la organización de una boda es que el presupuesto sea realista y no confíen solo en lo que les van a regalar. Porque os aseguro, que ahí es dónde empiezan los dramas, las idas de olla y las bodas horteras.

En resumen, que regales lo que quieras y puedas. Que no te agobies con las convenciones sociales, que si te apetece regalar dinero porque lo tienes y es más cómodo, adelante. Que te apetece currarte algo, adelante. Que lo justo te da para ir a la pelu ese día, pues eso es lo más importante, que no dejes de ir a una boda de alguien a quién aprecias y quieres por el dinero.

*Esto da para otro tema, pero digo yo que si te invitan a una boda lo suyo es felicitar, agradecer y confirmar tu asistencia. En ese momento, puedes pedirles el número o preguntarles lo que quieras a los novios.