Si te digo la palabra fisiosexología, ¿qué se te viene a la cabeza? ¿te imaginas qué puede ser? (Ay señor, ya viene la loca esta a contarnos palabros raros). Pues querida, la fisiosexología puede hacer maravillas por tu chichi.

Primero vamos a empezar dejando claro a qué hace alusión este palabro.

  • Fisioterapia: La Confederación Mundial por la Fisioterapia (W.C.P.T) lo define como «La Fisioterapia es el conjunto de métodos, actuaciones y técnicas que, mediante la aplicación de medios físicos, curan previenen, recuperan y adaptan a personas afectadas de disfunciones somáticas o a las que se desea mantener en un nivel adecuado de salud».
  • Sexología: La sexóloga Nayara Malnero lo resume como “la ciencia de los sexos. Es decir, de los hombres y las mujeres que se relacionan fuera y dentro de la cama”

La fisiosexología aúna la fisioterapia y la sexología. Se trata de una especialidad que se encuentra dentro del ámbito de la fisioterapia y cuyas herramientas o técnicas están enfocadas a mejorar o restablecer la función erótica. La función erótica, en general, es la capacidad de obtener placer.

Entonces, ¿Qué puede hacer la fisiosexología por mi chichi?:

  • Conseguir entender cómo funciona nuestro cuerpo para obtener placer

Nuestro cuerpo tiene un funcionamiento complejo, y más si no lo conocemos bien. ¿Cómo sabes lo que te gusta o lo que te genera más placer si no lo has probado?  Puedes conocer partes de tu cuerpo hasta ahora insólitas para ti. Relacionado con esto último, en la fisiosexología se trabaja el descubrimiento genital.

Otro de los aspectos que se tratan es el movimiento coital. Está orientado a descubrir qué posiciones van a mejor a tu cuerpo cuando realizas la penetración. Su objetivo es que disfrutes más.

  • Obtener mejores orgasmos

Si quieres tener mejores orgasmos tienes que trabajártelo. ¿Cómo? Ejercitando el perineo. El perineo es un conjunto de músculos que se encuentra entre el ano y los labios menores. También forma parte del suelo pélvico, una agrupación de ligamentos y músculos que rodean la vagina, la uretra y el recto. Se realizan ejercicios específicos (perineales) de fortalecimiento de la zona.

 

  • Evitar posibles disfunciones y disminución de la sensibilidad

Esto está muy relacionado con el suelo pélvico. Si este se debilita, puede llegar a ocasionarnos diferentes disfunciones o que nos disminuya la sensibilidad. Esta debilidad en la musculatura puede ser debido a diferentes factores. Estos son algunos ejemplos:

  • El embarazo
  • El parto
  • Cambios hormonales
  • Deportes de impacto
  • Estreñimiento
  • Debido a cambios hormonales

Los fisiosexólogos nos pueden ayudar a evitar esto mediante diferentes técnicas como por ejemplo los ejercicios Kegel o la Gimnasia Hipopresiva.

  • Gimnasia para el chichi

En el punto anterior te he nombrado los ejercicios Kegel y la Gimnasia Hipopresiva, pero ¿Qué son realmente?

  • Ejercicios Kegel: Antes de realizarlos, lo más adecuado es que un profesional te realice una valoración del suelo pélvico. Igualmente, es importante que el fisiosexólogo te asesore, ya que estos ejercicios están contraindicados para personas que sufren dispareunia, endometriosis o dolor pélvico crónico. Estos ejercicios implican la contracción de la musculatura del suelo pélvico (como si quisieses cortar el chorro del pis). Practicar estos ejercicios (si ya te ha dado el visto bueno un profesional), te puede reportar numerosos beneficios. Por ejemplo: incrementar la lubricación, aumentar el tono muscular o ayudar a tener una mayor consciencia de la zona.

 

  • Hipopresivos: Se trata de una serie de movimientos y de posturas que, combinados con la respiración, permiten trabajar la zona del abdomen de una forma relajada. Estos ejercicios están contraindicados para embarazadas y para personas con hipertensión arterial. Algunos ejemplos de los beneficios que reporta su práctica son: mejora de la salud sexual, mejora de la incontinencia urinaria, favorecen a la recuperación del posparto, etc.

Recuerda visitar a un especialista como el fisiosexólogo para que te ha una valoración del estado del suelo pélvico. Además, te ayudará a seleccionar los mejores ejercicios adaptados a tus necesidades.

¿Todavía no te he convencido? Echa un vistazo a más beneficios que te puede aportar la fisiosexología:

  • Fabricar mayor cantidad de lubricante natural
  • Ser capaz de tener mayor control sobre los orgasmos
  • Incrementar la capacidad de sentir placer y de llegar al orgasmo
  • Prevenir futuras pérdidas de orina