Muchas veces, a lo largo de mi vida de lesbiana, me he encontrado en situaciones delicadas. Si nos paramos a pensar hoy en día la visibilidad homosexual está en auge y clarísimamente nuestra situación y nuestros derechos han mejorado muchísimo si los comparamos con hace 30 años. A pesar de esto aún queda mucho camino que recorrer.
En muchísimas ocasiones me he encontrado en conversaciones de sexo en las que he flipado con las concepciones que tiene el mundo hetero de lo que hacemos en la cama. Demasiadas veces he tenido que escuchar que todos los homosexuales somos unos promiscuos. ¡Eh, si soy promiscua es por méritos propios no única y exclusivamente por ser gay! ¡No me ofendas!
Pero lo que verdaderamente me sorprende son las opiniones de gente que es homofriendly (es probable que acabe de inventarme esa palabra). Así que este post es para todos ustedes.
- El porno lésbico
Señoras y señores, en el punto número 1 tenemos lo peor que nos ha pasado a las lesbianas. Nunca es bueno generalizar, pero prácticamente todos esos videos están enfocados a un público masculino por lo que se centran en cosas que les gusten a ellos en vez de a nosotras. Se masca la tragedia. Para ver un ejemplo diríjase al punto siguiente.
- La famosa tijera
Bueno, bueno, bueno. He aquí la base del sexo lésbico. Toda la humanidad debe pensar que si no hacemos las tijeritas en cada polvo nos quitan el carnet de lesbianas o algo por el estilo. Pues no familia, no es real que estemos obsesionadas con el roce y mucho menos de esa manera. Hay otras mil maneras más cómodas de conseguir el mismo efecto. Lo siento.
- ¿Quién hace de hombre en la cama?
Esto siempre me ha hecho mucha gracia. Como me gustan las mujeres es obvio que necesito que alguien haga el papel de macho ibérico, ¿no? Error 404: lógica not found. No echamos a cara o cruz quién va a hacer esa noche de hombre. Como en cualquier cama es probable que haya alguien más activo o más pasivo, o que le gusten los juegos de paciente-doctor, ¡yo que sé! Pero no buscamos una figura masculina, no la necesitamos, asumidlo.
- Siempre usáis juguetes, ¿no?
Esta es la prima hermana de la anterior. Muchas personas piensan que el sexo es sinónimo de penetración y, como nosotras no tenemos nada con qué penetrar, estamos obligadas siempre a usar juguetes que nos lo permitan. ¡¡¡Me han llegado a decir que soy virgen y que moriré siéndolo porque nunca me van a penetrar!!! Cuéntaselo a mi himen, gracias. Para que quede claro: usamos juguetes única y exclusivamente cuando nos da la gana y no como necesidad. De la misma manera que lo hace una pareja hetero vaya.
- ¡Qué suerte, nunca tenéis que usar protección!
Es cierto que no necesitamos usar protección porque no corremos el riesgo de quedarnos embarazadas. También es cierto, y sorprendentemente mucha gente no lo sabe, que podemos contraer ETS como el resto del mundo por lo que cuando practicamos sexo con alguien “desconocido” debemos o deberíamos usar protección. Digo deberíamos por qué hay lesbianas que tampoco son conscientes de este riesgo y por tanto no lo previenen. Una ventaja es que podemos fabricar versiones low cost de las protecciones como pueden ser guantes de látex o envolver el asunto en papel film (ironía modo on).
¿Os han hecho a vosotras más preguntas del estilo?
