Llevo soltera desde verano y después de 7 años de relación pues estoy aprendiendo a desatarme.

Allá que voy por recomendación de mis amigos a hacerme Tinder, en principio no me gustaba porque es un escaparate y la ciudad en la que vivo es muy chica.

Me hago el perfil y empiezan los flechazos. Hablo con algunos y decido quedar.

El sujeto más alto que yo, morenito como a mí me gusta, barbita de 3 días y esas cosas que a ami me atraen. 

En principio todo bien, cenamos y la conversación fluía bastante, le van las bromas como  a mí, así que la cosa estuvo entretenida. Al terminar la cena propuse ir a tomar una copa para desinhibirnos, bailamos un poco y ahí comenzó el guarreo. Estaba claro. Iba a pasar. Llevaba toda la cena pensando cuanto quedaba para arrancarle le camisa.

Fuimos a su piso; de revista, por cierto. Deseosa porque fuese el empotrador del siglo y me castigara a base bien porque le estuve picando durante toda la noche, nos empezamos a quitar la ropa entre besos y caricias, eché mano del paquete y estaba la cosa calentita, así que me decidí a hacerle el famoso helicóptero de Estela Reinols, pero… ¡¡Qué coño es esto!!

No os hago esperar, amigas, el muchacho tenía lo que comúnmente llamamos garfio. Vamos, un pene curvo, doblado. Pero no un poquito, como tienen muchos, sino un fucking garfio LITERAL. 

He de decir, que el chico para nada estaba acomplejado, como debe ser; es más lo tenía ya más que estudiado y se notaba que hacía cosas específicas para darte gustirrinín aprovechando su picha doblada. Yo bajé y él me lo comió, en la medida de lo posible disfrutamos para ser una primera vez, tanto que se va a repetir la cosa.  

giphy

Pero no, aquí no acaba todo. A la mañana siguiente me voy a mi gimnasio como todos los sábados y al salir todo motivada tras la quema de calorías…  

UNA FURGONETA. Con un logotipo de un pirata, con su garfio correspondiente. Animaciones en fiestas infantiles. Yo meada, claro.

Pero la  verdad es que estoy deseando volver a quedar… ¡que viva lo diferente! <3

Elena Castro