Tipos de enfermedades de transmisión sexual y en qué consiste cada una de ellas
Autor: Dra. Elsa Díaz López
Cuando hablamos de la salud sexual y reproductiva, tenemos que referirnos a que es un derecho humano definido como un estado general de bienestar físico y mental en todos los aspectos relacionados con el sistema reproductivo, sus funciones y procesos. Así como el disfrute de una vida sexual satisfactoria y sin riesgos, y en la libertad para decidir.
Para alcanzar el nivel más alto posible de salud sexual debemos solicitar recibir e informar los relacionado con la sexualidad. Ya que también se enfrentan riesgos de salud como son las enfermedades de transmisión sexual (ETS), que tienen consecuencias graves para la salud reproductiva.
Consultamos a la Dra. Elsa Díaz, ginecóloga de doctoranytime, y esto es lo que nos ha contado de las ETS.
¿Qué son las ETS?
Las Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS) son enfermedades que pasan de una persona a otra, a través del contacto sexual, piel a piel o por secreciones. No requiere necesariamente penetración coital. Como tal, cualquier persona sexualmente activa puede contraer ETS. Existen diversos tipos de enfermedades sexuales, y debido a que no siempre muestran síntomas, las personas frecuentemente no solicitan atención médica, lo que puede tener consecuencias severas.
Las ETS van más allá de un impacto inmediato de la propia infección, pues pueden afectar en la fertilidad o en la transmisión de enfermedades hacia los hijos. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 1 millón de personas adquieren una infección de transmisión sexual. De las cuatro más frecuentes son clamidia, gonorrea, sífilis o trichomoniasis.
A pesar de que las ETS no presenten síntomas o molestias, pueden transmitirse durante las relaciones sexuales y hacer daño por un tiempo largo. Conocer las enfermedades de transmisión sexual y saber cómo cuidarse, es esencial para mantener una salud e higiene correcta.
Tipos de ETS
Las enfermedades de transmisión sexual se pueden contraer al tener relaciones sexuales vaginales, anales u orales. Entre las ETS, algunos tipos no necesariamente necesitan de un acto sexual para transmitirse como el herpes o el VPH que se propagan por el contacto de piel a piel.
Es muy común que las personas se infecten, principalmente, en la población joven. En México, uno de cada tres jóvenes de entre 18 y 30 años han padecido algún tipo de enfermedad sexual.
Entre los tipos de enfermedades de transmisión sexual, se encuentran:
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Chlamydia
Una de las enfermedades más comunes es la generada por la bacteria Chlamydia trachomatis. Puede afectar tanto a hombres como a mujeres y se contrae durante el sexo oral, anal o vaginal con alguien infectado.
Las mujeres pueden contraer clamidia en el recto, garganta o cuello del útero. La presencia de esta bacteria puede generar procesos infecciosos en el tracto genital. Ya que puede ascender hacia el útero y trompas uterinas generando una enfermedad pélvica inflamatoria (EPI). Esto, podría ocasionar acúmulos de secreción purulenta, llamados abscesos que requieren con frecuencia cirugías para su drenaje y manejo con múltiples antibióticos. En otras ocasiones puede formar cicatrices que ocluyan las trompas o afecten el útero o matriz y favorecer esterilidad, o bien, ser un factor para el desarrollo de embarazos ectópicos (fuera del útero).
En el caso de mujeres embarazadas la presencia de esta bacteria puede ocasionar ruptura prematura de membranas, partos pretérmino, infectar al bebé durante el parto y favorecer infecciones puerperales (en el período siguiente al nacimiento), lo que repercute no solo en el manejo médico de la madre sino en la separación temporal de madre e hijo y las implicaciones económicas.
En el caso de los hombres, podrían contraer clamidia en el recto, garganta, uretra (interior del pene), o desarrollar prostatitis con afectación importante a su estado general.
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Virus del papiloma humano (VPH)
Existen más de 200 tipos de VPH, ya que son un grupo de virus que se relaciones entre sí. Cerca de 40 de ellos afectan el tracto genital.
Se dividen en virus de alto y bajo riesgo, los de alto riesgo, en especial dos de ellos; 16 y 18 son responsables del 70% de los cánceres del cérvix, vulva vagina, ano, pene, cabeza y cuello (garganta y cavidad oral). Mientras que los de bajo riesgo pueden causar verrugas en diferentes partes del cuerpo como los genitales, la boca, garganta o el ano. El VPH se puede transmitir a través de relaciones sexuales o contacto íntimo de piel a piel. Como se puede observar afectan tanto a hombres como mujeres.
Los estudios muestran que a los 4 años de haber iniciado la vida sexual el 50% de las mujeres ya adquirieron algún tipo viral y su capacidad de adquirir otros virus de papiloma humano desciende con la edad, pero a los 45 años pueden volver a tener un pico de reinfección. Mientras que los varones tienen una gran capacidad durante toda su vida de adquirir diferentes tipos virales. Existen diversos factores de riesgo que favorecen su adquisición; Inicio de vida sexual antes de los 18 años, tener más tres parejas sexuales, tabaquismo, más de tres partos, entre los más frecuentes.
La vacunación contra VPH, una detección oportuna de cáncer a través de citologías o Papanicolaou, así como pruebas de detección de virus de papiloma humano y tratamientos oportunos, pueden salvar a muchas mujeres de una enfermedad que es totalmente prevenible.
- Gonorrea
La gonorrea puede contraerse a través del sexo vaginal, anal u oral que, al igual que la clamidia, podría infectar al bebé durante el parto. Es más común en los adultos jóvenes y, en ocasiones, no genera síntomas o los muestra levemente. A medida que pasa el tiempo, la gonorrea puede generar hemorragias entre los periodos menstruales, aumento de secreciones vaginales y dolor al orinar. En caso de no tratarse, puede causar problemas en el embarazo e infertilidad.
En los hombres, la gonorrea puede provocar problemas en la próstata y testículos. Además de causar dolor al orinar o secreción proveniente en el pene.
- Sífilis
La sífilis es causada por una bacteria que se puede contraer a través de las relaciones sexuales. Las personas con mayor riesgo de contagiarse son los hombres. En la primera etapa, la sífilis causa una llaga pequeña e indolora. En ocasiones, puede generar inflamación de los ganglios linfáticos cercanos. Sin embargo, muchas personas, pueden no encontrar o notar síntomas durante años, o estos pueden aparecer y desaparecer.
En caso de detectarse a tiempo, la sífilis podría ser curada con antibióticos.
- VIH y sida
El virus de inmunodeficiencia humana es un tipo de enfermedad que daña al sistema inmunitario. Esto ya que destruye un glóbulo blanco que ayuda al cuerpo a combatir las infecciones. Lo que lleva a tener un riesgo grande de sufrir infecciones graves y/o ciertos tipos de cáncer. El VIH se puede propagar a través de relaciones sexuales sin protección con una persona enferma, del contacto con la sangre de una persona con el virus, de madre a bebe durante el embarazo, parto o lactancia, compartiendo agujas.
Ahora bien, el sida, que se refiere al síndrome de inmunodeficiencia adquirida, es la etapa final de la infección por VIH. Pero, no todas las personas necesariamente desarrollan sida durante la infección. El herpes genital y la sífilis pueden aumentar el riesgo de infectarse por VIH.
¿Cómo evitar las ETS?
Cuando se inicia la vida sexual es importante reflexionar en aspectos como los riesgos y las responsabilidades. Una forma segura de no adquirir enfermedades de transmisión sexual es practicando la abstinencia.
Tratar de tener relaciones sexuales monograma es otra forma de disminuir los riesgos y, sobre todo, si antes de tener contacto sexual llevas a cabo estudios para detectar ETS, desafortunadamente es una práctica poco frecuente, pero es la más recomendable.
La comunicación como pareja es muy importante para una vida sexual y reproductiva sana, plantearse los riesgos que se tiene como son un embarazo no planeado y la adquisición de infecciones de transmisión sexual.
En ocasiones se tiene actividad sexual casual o esporádica y lo más recomendable es el uso de medidas de barrera como el condón. De hecho, aunque no sea una actividad esporádica es recomendable usarlo. Es importante recordar que el condón masculino no cubre la base de pene o el escroto en el varón o la vulva en la mujer, el roce durante la relación sexual favorece microtraumatismos que ayudan a la adquisición de enfermedades como molusco, herpes o VPH.
Acudir a consejería médica o sanitaria para utilizar medidas de prevención como vacunación contra VPH, hepatitis B, uso correcto del condón y medidas anticonceptivas, así como pruebas para detectar ETS y detección oportuna de cáncer, son algunas estrategias que pueden apoyar la prevención en la adquisición de ETS, o bien, para su manejo oportuno.
Agradecemos la colaboración de la Dra. Elsa Díaz Lopez, ginecóloga obstetra, por compartir y verificar la información para el desarrollo de este artículo. Estudió la especialidad de Ginecología y Obstetricia en la Universidad Anáhuac. Cuenta con 28 años de experiencia médica y se especializa en colposcopía, cirugía laparoscópica, VPH, vacunación, infecciones de transmisión sexual, cirugía láser y bioética.
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