Cuando conocí Couchsurfing (CS), allá por el año 2011, no salía de mi asombro (y felicidad).
¿Que podría viajar y dormir gratis, con sólo completar mi perfil online? ¿Que podría conocer viajeres que venían a mi ciudad y hospedarles y/o llevarles a pasear? ¿Que de verdad era gratis, completamente gratis? Es que así funciona CS: puedes ofrecer alojamiento “gratuito” en tu casa, y también solicitarlo cuando viajas. La “gratuidad” va con comillas, porque en realidad ofreces algo muy valioso que es tu tiempo.
La propuesta es que exista cierto tipo de intercambio, si te alojás gratis, se sobrentiende que ofrecerás algo a tu anfitrión: conversaciones, algún regalo de tu país de origen, cocinar alguna comida, etc. No es obligatorio pero se encuentra dentro de las reglas de cortesía implícitas.
Flipé con esta red social y enseguida completé mi perfil con fotos e información personal. La usé por años. Recibí en casa y en mi ciudad a viajeras y viajeros de distintos países quienes luego me dejaban en el sitio una referencia positiva (una especie de nota en la que se evalúa tu experiencia con esa persona que te recibió en su casa por medio de la app) y luego de algunos años y de haber sumado referencias positivas, me animé yo también a solicitar alojamiento cuando viajaba.
Pero en los últimos años, Couchsurfing comenzó a publicitarse con menos espíritu de comunidad de intercambios y más énfasis en la gratuidad y la posibilidad de conocer a muchas personas.
También se volvió más laxo en cuanto a completar los perfiles (básicamente puedes generar un perfil que esté incompleto en un 90%) y esto acarreó consecuencias. En lo positivo, mucha más gente se sumó a la comunidad. En lo negativo, muchas personas lo confundieron (y lo confunden) con una app de citas.
Si todo va bien, es genial, pues has invitado a dormir a tu casa a una viajera/o. Pero si el interés no es recíproco, es un lío porque estás dentro de la casa de una persona que has contactado por un interés turístico/cultural y te está mostrando intenciones que exceden eso y que pueden generar situaciones difíciles, incómodas y hasta inseguras.
Después de sucesivas experiencias incómodas logré desarrollar un breve manual para identificar a aquellas personas que probablemente estén interesados en usar Couchsurfing como una app de citas. Si quieres evitarles ¡estos tips son para ti!
Es posible que la persona tenga intenciones sexuales si:
- En su perfil establece que únicamente acepta recibir mujeres.
- En las referencias encuentras que el 100% o el 90% de les viajeres que han dejado un comentario son mujeres.
- Las fotos de la persona no incluyen imágenes en las que se los vea claramente y en lugar de ello hay paisajes y fotos sociales con varias personas a la vez.
- En las fotos se ve a la persona en situaciones muy cool con distintas viajeras mujeres.
- No especifica qué tipo de cama/colchón tienen para el huésped.
- Ofrece directamente compartir la cama y/o la habitación.
Lamentablemente, extra cuidado con quienes se ofrecen a alojarte antes que tú lo hayas solicitado. Existe la opción de crear un viaje público, en la que cuentas tu interés por visitar una ciudad y tus fechas aproximadas. En este caso, tienes que chequear los puntos 1 al 6 de todos modos.
Antes de terminar, tres aclaraciones importantes.
- La primera, no importa que tú aclares en tu perfil que no estás buscando algún tipo de relación. La persona con segundas intenciones no lo leerá o no lo respetará.
- La segunda: si aún te quedan dudas respecto de una persona que vaya a alojarte, puedes enviar mensajes privados a personas que hayan dejado referencias en su perfil y preguntar qué tal ha resultado la experiencia realmente. Para evitar una contrarreferencia negativa, muchas personas evitan dejar una reseña negativa aunque la experiencia no haya sido positiva.
- La tercera: esta información tiene el objetivo de generar herramientas de cuidado, para continuar utilizando CS, ya que confiamos en que mucha gente la utiliza de manera genuina, y se conocen personas increíbles y muy generosas que nos siguen haciendo creer en la humanidad.
