Semana sí y semana también leo en el foro a chicas preocupadas porque todavía no han perdido la virginidad. Algunas tienen 30 años, otras 20 y otras incluso 15 (sí, sí, como leéis). Yo leo sus mensajes y no puedo evitar pensar en mi historia. Unas queriendo hacerlo YA y yo que desearía volver atrás en una máquina del tiempo para haber tardado más.

Tenía 17 años y estaba tremendamente enamorada de Javi, un chico de mi instituto al que conocí en 1º de la ESO. A mí me parecía guapísimo, aunque no era el típico chico que atrae todas las miradas. Tenía los ojos azules, el pelo un poco larguito y siempre estaba haciendo bromas, aunque a la hora de la verdad era bastante tímido.

En 3º de la ESO coincidimos en la misma clase y él y su amigo Andrés empezaron a salir con mi grupo de amigos. Empezamos a llevarnos más y un día le confesé lo que sentía. Él me dijo que le parecía bien y “nos hicimos novios”. Éramos unos críos y yo sé que él empezó a salir conmigo por aburrimiento y por el subidón que sintió al gustarle a una chica. No estaba enamorado de mí, al menos no como yo lo estaba de él.

Al principio todo parecía perfecto. Se ganó a mis amigos y yo besaba el suelo que pisaba. Estaba loca por él. Pasaron los años y comenzamos a aislarnos. Empezó a ponerme en contra de mis amigos diciendo que los chicos nos envidiaban porque estaban pillados por mí y que las chicas me criticaban porque estaban celosas de que yo tuviese una relación tan perfecta. Le creí y me quedé sola, o mejor dicho con él, que en el fondo era peor que estar sola.

Yo actuaba como su animadora particular. Hacía todo lo que él quería porque en el fondo sentía que le amaba. Me volví insegura, celosa, posesiva y nerviosa, pero todos estos sentimientos los vivía en silencio. Tenía que aparentar ser la novia perfecta.

No sé muy bien cómo, pero él me convenció para hacerlo por primera vez. Sus trucos eran tan infalibles que hasta me hizo pensar que yo lo deseaba. En realidad tenía dudas y no quería hacerlo ya, pero él sí y dio la vuelta a la tortilla para que yo se lo pidiese.

Resultado de imagen de virginidad

Fue horrible. Yo no estaba nada lubricada y me estaba doliendo horrores, y él al ver que yo lloraba me pidió que se la chupase “porque estaba deprimiéndose”. Al final acabó realizándome sexo anal y corriéndose mientras yo me sentía como una mierda. Después de esa horrible primera vez llegaron muchas más y todas acababan igual, con él dándome por culo porque sino no se corría.

Un año después fuimos a la universidad y yo me armé de valor para dejarlo con él. No le quise volver a ver el pelo y poco a poco mis amigos se enteraron de la situación, pidiéndome perdón por no haber visto la realidad. Yo no fui la única que se dejó manipular, ellos también.

Con esta historia no quiero convenceros de nada, sólo daros varios consejos sobre la primera vez.

  • Hacerlo con alguien de quien estéis enamoradas no os asegura una experiencia bonita.
  • Si estáis pasándolo mal y la otra persona tiene cero empatía, parad inmediatamente y no volváis a quedar con él.
  • Tenéis derecho a cambiar de opinión antes, durante o después de follar.
  • Por favor, no hagáis nada de lo que no estáis seguras. Si os intentan convencer u os chantajean emocionalmente es que sólo os quieren utilizar.
  • Usad protección SIEMPRE, aunque el chico se invente escusas como que pierde sensibilidad o que le duele ponerse un condón. Más duele una ETS o un embarazo no deseado.

Follad mucho, follad bien y follad con cabeza, consenso y respeto.

 

Anónimo