Parece que el Ghosting es algo muy nuevo, pero ya en el año 2000 lo sufrimos con creces muchas de las presentes.

Lo que sucede es que nosotras no teníamos una definición tan cool y acertada para aquellos fantasmas que se aparecían y desaparecían a su antojo. Éramos algo más rudas, evidentes y literales, pero los apelativos que usábamos para describir esta situación no tienen desperdicio.

Se ha quedado sin saldo y ya no sirve ni para recargar. ¡Qué tiempos aquellos! Ibas al estanco y te recargaban el móvil para seguir enviando SMS. Sí nenas, hubo una época que era así y cuando nuestros ligues nos dejaban de enviar canciones románticas como símbolo de buenas noches era por dos cosas: o se le había acabado el saldo o se le había acabado las ganas de hablar. Muchas veces podías ver en el insti o en el barrio a ese galán y si te acercabas a él para pedirle explicaciones solo se atrevía a decir lo siguiente: ‘es que no tengo saldo y tampoco quiero llamarte al fijo porque me da palo’. Palo el que le hubiera dado yo, pero mira, el destino siempre es sabio.

Es tan tonto que no le da para más. Obvi0 pero cierto. Llegaba un punto que no te querías arrastrar y solo te quedaba pensar que esa personica no daba para más. En lugar de echarle valor y decir realmente lo que sentía, te dejaba de escribir, de llamar y te bloqueaba en el messenger. Madurez en estado puro.

Se lo habrá comido un cocodrilo. ¡Esta es mi favorita! Cuando de la noche a la mañana un señor ya no existía en mi vida, me imaginaba la escena de la peli de Peter Pan en la que Garfio era devorado por un cocodrilo, solo que en lugar de Hook estaba el desgraciado que no supo valorar lo que tenía delante. Era una buena manera de enterrarlo directamente.

Puede que mi novio sea Casper. Puede que de ahí venga el término ‘Caspering’, pero antes de que llegara al mundo de la psicología, ya lo decíamos cuando el chico que te gustaba te hacía caso en la intimidad, pero pasaba de ti en público. Si había una buena manera de definir a un fantasma en estado puro, era esa.

Se habrá ido con Mulder. ¡Alerta Spoiler! Esta broma no será comprendida por muchos, pero aquellos que éramos fans de Expediente X y habíamos sido ignorados cruelmente por imbéciles creídos, creíamos que en realidad habían sido abducidos por un platillo volante para llevarlos a su planeta natal. El primer ejemplo de ello era Mulder, pero como él, habían varios que se podrían haber ido también de viaje.