Ya no sé si soy yo la rara, o es porque tengo cuatro años más que él y de verdad es que los hombres maduran a los cincuenta, pero creo que a estas edades y llevando cinco años juntos deberíamos empezar a pensar en el futuro, y su futuro se ciñe a salir de cañas el fin de semana, ver partidos y viajar, lo cual me parece maravilloso si no fuera porque yo sigo en casa de mi madre, que la pobre no dice nada, pero me mira con cara de a partir de los sesenta vas a tener problemas para que te den una hipoteca.
Ya tenemos los dos trabajos estables y nuestros coches pagados como para poder plantearnos el irnos a vivir juntos, aunque sea de alquiler de momento para ver cómo nos va. Reconozco que la pareja perfecta no somos y las broncas las tenemos todas, sobre todo por este tema, que ya no tengo edad para andar follando en el coche o en casa de mi madre cuando sale con las amigas, o en la casa de campo de los padres cuando no van, ni de gastarme pasta en hoteles cuando podemos tener nuestra casa.
El tema hijos ya sí que me da pánico tocarlo y eso que estoy con el arroz ya hirviendo a borbotones, tampoco lo tengo claro de momento, mejor ni tocarlo. Su madre está hasta ahí mismo de que el niño no arranque y siga en casa y me culpa a mí y yo ya no sé si seguir con esta relación tiene futuro o estoy perdiendo el tiempo.