Desde que fui madre hace 8 meses, las crisis de ansiedad y las lágrimas contrarrestan la felicidad y el amor que siento por mi hija. El principal problema es mi relación con la familia de mi pareja. Se ha convertido en batalla campal donde me dejan claro lo que ellos creen que son mis carencias cómo madre, porque ellos, en crianza, siempre llevan la razón (he de decir que nuestros estilos de crianza difieren mucho).
Ha llegado un punto en el que me afecta muchísimo psicológicamente, y aunque estuve en terapia y ya no me siento una madre de mierda, me siguen afectando sus comentarios y el no saber reaccionar por mi parte. Yo siempre he sido una chica con carácter a la que nadie pisaba, y esta gente me está mermando dónde más me duele, en mi papel como madre. Estoy tan quemada que siento que en cualquier momento voy a explotar y ya no sé qué hacer para que no me afecten lo más mínimo los comentarios de mierda que siempre me regalan. Les estoy cogiendo tal tirria que cuando les veo con mi hija en brazos se me retuerce todo.
Y me duele, me duele por mi chico, por mi hija, y porque no sé qué coño les he hecho para que me odien de esta manera. Porque me siento odiada y repudiada en esa familia, jamás había sentido tanto rechazo… Me siento sin fuerzas para enfrentarme a ellos, sin ganas, derrotada. A esto se suma el sentirme sola, porque mis amigas ya no están como lo estaban antes, me siento fea, porque mi cuerpo ha cambiado, ya no tengo ganas ni de peinarme. Siento que van a acabar conmigo, a veces siento que ya lo están haciendo.
Y mi pareja, que se posiciona siempre a mi lado y me tiende siempre la mano, no me termina de comprender, dice que ya sólo le queda dejar de hablarles, pero no quiero ser la culpable de romper los lazos con su familia. ¿Alguien se ha sentido así con su familia política? ¿Alguien que me pueda ayudar contándome qué y cómo lo hizo? Gracias por leerme, M.