¡Hola bellezones!
Hace tiempo que algo me ronda la cabeza, y como no sé a quién contárselo ni preguntar he decidido soltarlo por aquí. Así que allá va.
Siempre he tenido los labios menores muy grandes, y nunca me había importado. Sí, a vecces cuando era más jovencita pensaba «¿esto es normal?» pero no le daba más vueltas. Es piel, punto. Pero resulta que, hace unos meses, una amiga comenzó a hablarme de labioplastias y del asquete que le daba eso de tener pellejo ahí colgando y que le parecía antihigiénico (todo esto sin saber lo mío, vaya). Entonces empecé a comerme el tarro. Llevaba toda mi vida siendo consciente de que aquello no era algo «normal» (me ciño al porno y cualquier otro chichi que se haya podido ver por la tele o internés), pero tampoco llegué a pesar que llegase a provocar disgusto o similares.
Después me tropecé con vuestro artículo «Mi chichi no es raro, es especial» y la alegría que sentí fui infinita, me sentí completamente identificada. Aun así, aunque me recuerdo que no pasa nada, que mi chirri es así y por nada del mundo me operaría para cambiarlo, no puedo dejar de pensar en que cuando llegue el momento de que un zagal me meta las manos (y demás, espero) en los pantalones, saldrá corriendo.
Por eso, gordibuenas del mundo con totos especiales, os quiero preguntar: ¿ha sido un impedimento en algún momento sexual de vuestra vida? ¿Alguien se os ha «quejado» al veros el chichi o ha remugado que qué asco? ¿Podré hacer las paces algún día con mis bonicos labios?
Muchas gracias, muchachuelas. Que Ashley Graham os bendiga♥