Pues el consejo para que no quiera beber ni fumar, es prohibirle que se junte con malas compañías (su prima o amigos que fumen o beban), poner un horario estricto de llegada, revisar su móvil y redes sociales (que yo creo que no debería tener, pero bueno), que aprenda los riesgos del consumo de alcohol y drogas, y si ves que ha bebido (como fue el caso), pues castigarla, por ejemplo sin salir un mes.
Ahora bien, tú eres su madre y tú decidirás qué haces, esto sólo son consejos.
A la tal A, que dice que no pasa nada porque beba algo, supongo que de beber en tu adolescencia te quedó el cerebro tocado, y por eso justificas que los niños tomen alcohol. Se os va la olla a algunas.