Hola chicas. Me animo a contaros lo que me ha pasado hoy. Os pongo en antecedentes: mido 1’73, llevo una talla 44 normalmente y soy tetona y de muslo recio. En este momento estoy embarazada de 6 meses, tengo una barriga redondita preciosa y no muy grande, de hecho aún me meto en mis vaqueros. Bueno, a lo que vamos. Esta mañana he ido con mi marido y mi niña de 5 años a buscar un vestido para la boda de mi cuñado que es en un mes, al entrar se me acerca una dependienta para preguntarme si me puede ayudar, yo le contesto que si y le explico que estoy buscando un vestido que sea amplio, con corte debajo del pecho pues necesito un poco de espacio ya que me tiene que crecer un poco más la barriga, y aquí viene cuando la matan… Pone un poco de cara de agria y mira a mi hija y le dice: «tu madre le está pidiendo milagros a Lourdes»… Siguiendo el tono de broma(aunque no me ha parecido acertado su comentario) le contesto que tan difícil no será porque no creo ser la única embarazada que va a una boda. Bueno, pues nos acercamos a una pared llena de vestidos y me pregunta que de qué talla y yo le digo que 44 o 46 por la barriga, a lo que ella me contesta: «Uy, no, no, la 48 por lo menos, que tu es que eres muy grande», (ale, ya vamos por la segunda) y yo le contesto que cada uno es como es y que seguro que hay más grandes que yo. Imagino que ahí ya se me ha torcido un poco el morro porque como que ha rectificado y me ha dicho que es que soy muy alta, y yo le he insistido que hay mujeres más altas que yo. Me da varios vestidos, entro a probarme y el primero se me queda enorme, y fíjate, se ha sorprendido porque no se lo esperaba, me pruebo el segundo, que me quedaba bonito y me dice, un poco seca, que ella ya no se probaba más, que viendo cómo me quedaba ese no iba a encontrar otro mejor o que me viniera… Yo le digo que si que me voy a probar más, que no me voy a quedar con ese sin comparar. Así que sigo probándome vestidos, y ¡oh, sorpresa! me venían 6 de 7 y todos me quedaban bien(tengo un perfil divino con mi barrigota, jajaja), la dependienta cada vez que salía me decía: «Anda, pues también te queda bien»… En fin, que para no enrollarme mucho más, os diré que no me he comprado ninguno porque de verdad que no me he sentido bien atendida, y que como le he dicho a mi marido, por suerte yo me quiero mucho, y que no estoy pasando un embarazo en el que me sienta mal por mi cuerpo, porque me veo bien y apenas he cogido peso. Pero que me ha resultado indignante y poco adecuado ese tipo de comentarios porque imagináos que se los hace a una mujer que se sienta mal consigo misma, ya sea de normal o por los cambios corporales producidos por el embarazo… Hubiera podido dejar echa polvo a cualquiera en un momento muy vulnerable, creo yo. En fin, ¿qué opináis?